«La explotación recibió todos los sacramentos»

El arrendatario de la cantera cree que las prescripciones ordenadas por la Junta en la resolución no tienen sentido, aunque asegura que pondrán remedio a las deficiencias denunciadas para que la institución permita reanudar las extracciones cuanto antes. Ramiro Méndez insiste en que deben restaurar los taludes de la zona de arriba y no cuentan con acceso en este área para acometer el trabajo, ya que la Junta no autoriza el camino. Asegura que existe riesgo para trabajar en este espacio, ya que los taludes cuentan con más de veinte metros y eso no está permitido por la legislación. Recuerda que en su día Medio Ambiente aprobó «con todos los sacramentos» el proyecto de restauración y «ahora no permiten el acceso para que se puedan realizar estas labores». Está convencido de que toda esta operación responde a «presiones políticas y sociales» y se pregunta qué harán la treintena de trabajadores de esta explotación ante el cierre y la falta de actividad. Respecto a los problemas con la maquinaria, Méndez dice que pondrán al día la documentación en el registro de Minas, porque ahora alguna ha sido cambiada por otra.