La UPL solicita un plan de reformas para el barrio de Santa Marina
Porque «la situación es inadmisible», ante «el absoluto abandono y la falta de mantenimiento», el grupo de la UPL en el Ayuntamiento solicitó ayer al equipo de gobierno que acometa «un plan de actuación para el barrio de Santa Marina», en el que se detalle «la necesidad de aplicar las ordenanzas de acceso al casco histórico, donde se reseña que no pueden entrar camiones de más de ocho toneladas, que destrozan el firme; se limpien los grafitis, que llenan todas las paredes de la zona; se mejore la iluminación, insuficiente para una de las zonas más sentidas y emblemáticas de la ciudad; y se destine una brigada de obras y otra de jardines de forma permanente para restaurar todos los desperfectos que existen», según exigió el portavoz leonesista, que estuvo acompañado por su compañero Alejandro Valderas. Los dos edil denunciaron «la iluminación defectuosa de la iglesia; el encharcamiento que sufren todas sus calles por la defectuosa peatonalización; el irregular reparto de los bolardos; y el estado del adoquinado, que hace que el barrio parezca Bosnia». «Le traemos un regalo, para que vea que es verdad», ofrendó Chamorro con un adoquín envuelto en celofán.