Fele y Sindicatos se comprometen a que los próximos convenios desarrollen la Ley de Igualdad

Diálogo y afán conciliador. Con esta voluntad abordaron ayer las organizaciones sindicales y la Federación Leonesa de Empresarios (Fele) la comisión ejecutiva de CC.OO. y UGT, en la que pusieron sobre la mesa asuntos de especial relevancia para los trabajadores de la provincia. La inercia de la actualidad mandó en una reunión en la que los representantes laborales arrancaron de la patronal el compromiso para que la negociación de los próximos convenios colectivos incorpore las cláusulas que permitan desarrollar la Ley de Igualdad. Una norma que está pendiente de su aprobación -el jueves- por el Congreso de los Diputados y que entrará en vigor antes de las elecciones municipales y autonómicas del 27 de mayo. Trabajadores y empresarios mostraron su implicación en el desarrollo de una legislación que recoge, entre otros asuntos, planes de igualdad dentro de las compañías. En la misma senda y sin salir de la pauta de la relevancia, los secretarios provinciales de CC.OO. y UGT, Ignacio Fernández y Arturo Fernández respectivamente, incidieron en el problema de la siniestralidad laboral que se da en León. «Somos conscientes del peligro y por eso hay que hacer un esfuerzo mayor para que todos pongamos los medios para evitar los accidentes», adujo Arturo Fernández, quien indicó que los sindicatos van a trasladar a los trabajadores los medios de seguridad que tienen a su alcance. Una actuación -dijo- con la que se pretende reducir la cifra del 2006, año en el que 25 personas fallecieron mientras desempeñaban su trabajo. Otro de los asuntos que encontraron hueco en el orden del día, alude al empleo, cuyos datos del último año, con una reducción de la temporalidad resuelta con un incremento de los contratos indefinidos, fueron valorados por todas las partes de manera «satisfactoria». «Haremos todo lo posible» El presidente de la Fele, José Elías Fernández Lobato, aseguró que se intentará por todos los medios desbloquear el convenio de transportes de mercancías por carretera, así como el de oficinas y despachos. Un compromiso entre patronal y sindicatos que evitaría, si se alcanza el concierto con los afectados, que se cumpla el calendario de movilizaciones que plantean los transportistas.