Villada inaugura un albergue en memoria de los fallecidos en el accidente de tren
La localidad palentina de Villada, sacudida el 21 de agosto del 2006 por el trágico accidente ferroviario que le costó la vida a siete personas y heridas a más de 70, inauguró ayer un albergue de peregrinos que recuerda a las víctimas del diurno La Coruña-Vigo-Bilbao-Hendaya. El albergue, que ha sido rehabilitado en los últimos meses en un espacio verde de la localidad y está proyectado para 20 plazas y permanecerá abierto durante todo el año, lleva el nombre de los cooperantes burgaleses José Manzano y Julián Campo, dos de los fallecidos del trágico accidente ferroviario. La inauguración del albergue coincidió ayer con la celebración de la Feria de la Matanza de Villada en la que el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Heliodoro Gallego, y la periodista Eva Celada, recibieron el blusón de mondongueros. El alcalde de la localidad, Julián González, señaló antes de iniciarse los festejos programados que el albergue de peregrinos en memoria de los dos cooperantes burgaleses ha sido un proyecto que el Ayuntamiento «culminó» una vez puesto en marcha el proyecto tras desencadenarse la tragedia. Asimismo, el alcalde aseguró que Fomento aún no se ha pronunciado sobre la petición del Ayuntamiento de construir conjuntamente un monolito en el lugar del siniestro en recuerdo y homenaje a todas las víctimas. «La propuesta fue cursada en su día, pero todavía no nos han contestado», comentó el primer edil de Villada. El monolito «debería estar situado en el lugar del siniestro para recordar a todas las víctimas, así como a los sanitarios y al pueblo de Villada en general que se echó literalmente a las vías para ayudar en esos trágicos momentos».