De aquellas calderetas...

Los «varones» del PP en la provincia no quieren entrar en polémicas, ni valorar las posibilidades de uno u otro candidato, ni siquiera reconocer que estas pugnas dividen. Uno a uno se limitan a contestar -sin más matices y a toda prisa, no sea que se les escape algo que no convenga- que la designación del candidato a la presidencia de la Diputación es cosa de los órganos de gobierno del partido y a ellos se remiten. Siete son los hombres que velan por el PP en la provincia y, además, cinco de ellos son diputados e integran el equipo de gobierno actual de García-Prieto (Cipriano Elías Martínez, Juan Martínez Majo, Ramón Ferrero, Pedro Vicente Sánchez y Lupicinio Rodrigo), los otros dos son Fidel Cerezales (Bierzo) y Francisco Nistal (Astorga) Es difícil, por no decir imposible, que se desmarquen de los deseos de Isabel Carrasco -empeñada a toda costa en ser ella la candidata-, teniendo en cuenta que prácticamente todos ellos participaron en aquella famosa caldereta/s de cordero en casa de «Pano» en Riello, en la que respaldaron a la senadora como jefa de filas del PP para sustituir a Mario Amilivia. Las intenciones de García-Prieto -que casi no pudo ni manifestar por ser acalladas con una caldereta- por tomar las riendas del partido se frustraron en una sola cena. De la noche a la mañana también el presidente regional del partido, Juan Vicente Herrera, se encontró con una candidata ya creada y avalada y sin posibilidad de meter baza alguna. El presidente de la Diputación en aquella batalla contó únicamente con el apoyo expreso de Amilivia y del grupo de Fátima López Placer, además de algún que otro de sus diputados. Tuvo que seguir sin perder la compostura con un grupo -la mayoría de su equipo de gobierno- que le había dado la espalda con nocturnidad y alevosía. Con el transcurrir de los meses, las aguas se calmaron hasta que hace más o menos un año Carrasco ya comentó a sus más cercanos colaboradores su intención de ser ella la candidata a la Diputación. Primero se aseguró un puesto en la lista de un resignado Amilivia, a quien no le quedó más remedio que aceptar condiciones si quería repetir como candidato a la Alcaldía. Tras meses de intriga, la filtración de la lista del actual alcalde de la ciudad ya ha inclinado la balanza. «Pertenezco a un partido y respetaré la decisión» (Nistal); «Me atengo a los órganos de gobierno del partido» (Pano); «La nominación debe hacerse a través del partido» (Lupicinio Rodrigo); «El partido tiene sus órganos para expresarse y yo no opino» (Cerezales)...