Más de 200 guardias civiles vigilarán el tráfico en las carreteras leonesas

El delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, alertó, durante el inicio de la segunda operación de Tráfico de Semana Santa, sobre la importancia de que los conductores observen la velocidad adecuada, ya que lo contrario representa la causa del noventa por ciento de los accidentes. Para asegurar el desarrollo más racional posible del tráfico, la DGT dispondrá de más de 200 agentes de control sobre las carreteras leonesas, encargados de velar por la seguridad de los usuarios que en estos días llevan el tránsito a los niveles de densidad más altos de todo el año. En la vigilancia participan, además de dotaciones de la Guardia Civil de Tráfico, agentes de los cuerpos de seguridad ciudadana, que reforzarán la vigilancia en los ámbitos de carreteras secundarias. Precisamente, a los usuarios de este tipo de vías va dirigida una de las advertencias lanzadas por los representantes gubernamentales, que recomiendan extremar la prudencia en desplazamientos cortos que se realizan durante estos cuatro días festivos en función de las estadísticas de siniestros que rodean a la red secundaria. Restricciones y densidad Tráfico restringe desde ayer la circulación de mercancías peligrosas y transportes especiales, así como vehículos con carga máxima autorizada de más de 7,5 toneladas en las carreteras con mayor densidad de Tráfico, que en la provincia de León se define a través de la Autopista AP-66, la A-6, y las Nacionales 120 y 601. Se esperan problemas de acceso también a la capital, sobre todo por las vías de entrada sur y oeste, donde confluyen los vehículos que proceden de la autopista de Asturias, A-66 y la carretera de Astorga. El delegado del Gobierno apoyó con su presencia en las carreteras «la labor de los hombres y mujeres de la Guardia Civil en general y de Tráfico en particular, además de los funcionarios de la DGT» que durante estas fechas trabajan para velar por la fluidez y la seguridad de la circulación en la autonomía donde disponen de setecientos vehículos, 51 radares fijos y treinta móviles para contribuir a evitar que se produzcan siniestros, sobre todo de carácter mortal. Alejo matizó que funcionarán de forma permanente más de setenta radares -entre fijos y móviles- y expresó su deseo de que «todos regresemos a casa» tras las vacaciones, según recoge la Agencia Efe. Movimientos Fuentes consultadas en la DGT calculan que entre los días 30 de marzo y 9 de abril (desde la primera operación salida al fin del operativo especial previsto por la Semana Santa) circulen por las carreteras leonesas alrededor de 600.000 vehículos. De todos los movimientos, los responsables en la política de seguridad vial acentúan el peligro de los desplazamientos cortos y en horarios nocturnos, o a primeras horas de la mañana. Alcohol, móviles, cinturón El delegado del Gobierno resumió los consejos que se transmiten a los conductores que se van a poner en carretera: «La vigilancia se intensificará para evitar que nadie conduzca después de tomar alcohol; los controles de velocidad y los despistes en la conducción por el uso de móviles». En las carreteras de la autonomía se produjeron durante el dispositivo especial de la Semana Santa pasada ocho muertes menos, lo que supone una reducción del 53,33 por ciento. En 2005, también se produjo un descenso, del 21,05 por ciento, de los fallecimientos respecto a 2004. Durante el pasado año, el 17 por ciento de los muertos en turismos y furgonetas en la autonomía no llevaba el cinturón de seguridad puesto. El 83% de las víctimas en este período hacía uso del mismo, aunque en el cómputo del año este porcentaje se rebajó al 52%. La DGT confía en mejorar resultados. El sector del transporte cerró ayer la última de las cuatro jornadas de huelga convocadas en protesta por la negociación del convenio colectivo con una protesta en la carretera del Portillo que provocó retenciones durante alrededor de una hora. Los sindicatos han cifrado el seguimiento de la huelga en el 80% de los 1.500 transportistas afectados, aunque también se han lamentado de haber tenido que utilizar piquetes en algunas de las empresas del sector ante las presiones de los empresarios para mantener la actividad. Los transportitas convocaron la huelga de cuatro días la semana pasada, después de que la mediación del Servicio de Relaciones Laborales de Castilla y León (Serla) no consiguiese acercar posturas entre los representantes de los trabajadores y la patronal. Sin convenio Ambas partes se encuentran intentando llegar a un acuerdo sobre el convenio colectivo desde hace más de un año, cuando concluyó el anterior acuerdo, en diciembre del 2005. Los trabajadores reclaman, fundamentalmente, un salario medio bruto de 14.000 euros, mientras que la patronal ofrece poco más de 13.000 euros anuales. Los sindicatos consideran ese incremento del 16% como necesario para alcanzar unas remuneraciones «dignas». De momento la patronal mantiene su postura de ofrecer una subida salarial del 5% en el caso de que se flexibilicen los descansos; y del 4,5% si el día y medio se mantiene como hasta ahora, la tarde del sábado y el domingo. Los empresarios pretenden que las jornadas de descanso se asignen según las necesidades de las empresas. Los trabajadores exigen también que el dinero que cobran como dietas se incluya en los salarios, de forma que contabilice a la hora de cobrar bajas y jubilaciones; y demandan también una serie de mejoras sociales a las que hasta ahora la patronal no ha dado respuesta. Los trabajadores deberán decidir ahora qué medidas adoptan para mantener sus exigencias, después de llevar a cabo la amenaza que habían lanzado a la patronal de parar durante cuatro días. Trabajadores afectados El número de trabajadores afectados por estas medidas es de 1.500, entre los que no se incluyen ni los trabajadores autónomos ni los transportistas de la construcción. Durante los días de huelga varios piquetes informativos han recorrido las instalaciones de los transportistas, principalmente los polígonos industriales, donde se concentra buena parte de la actividad. También el jueves se cortó durante unos minutos la carretera de Onzonilla como medida de protesta, aunque fue ayer, coincidiendo con la operación salida de Semana Santa, cuando se produjo la mayor retención. «Lo deseable e importante es que todos regresemos a casa tras las vacaciones» MIGUEL ALEJO Delegado del Gobierno Tres mujeres resultaron heridas a consecuencia del accidente de circulación registrado esta tarde en la carretera C-623 próxima a la capital leonesa, donde se produjo una colisión en la que se vieron implicados tres turismos, según los datos facilitados por el Servicio de Emergencias. Por otra parte, un trabajador de las obras de la Variante de Pajares (tramo La Robla -Túneles de Pajares) sufrió un accidente al volcar el camión que conducía. El suceso tuvo lugar en la Localidad de Peredilla.