Invenciones técnicas sin destino definido
El ministro de Defensa (en la foto con el presidente de Aetic, Jesús Banegas, destacó ayer ante los participantes en el foro de León que la producción tecnológica «ya no tiene una finalidad estricta, nadie se atreve a adivinar cuál es el destino final de una invención técnica». Por ello abogó por la colaboración entre las empresas privadas y los organismos públicos, por crear sinergias que permitan utilizar los avances en la cuestión que más preocupa a las sociedades actuales, la de la seguridad. «Hemos avanzado mucho, por ejemplo, en el control de fronteras. Es un uso militar, pero imposible sin la colaboración de las empresas».