Gordon-Yiyo

El buen vino debe mantenerse en reposo, en una buena barrica, a su temperatura ideal y, sobre todo, en un lugar con poca luz, casi la misma con la que han dejado en el Partido Popular a José María López Benito, que en poco más de dos años ha pasado de ser presidente provincial a número dos en la lista de Gordoncillo. Porque ése será el próximo destino de quien en su momento fue uno de los concejales estrella del hoy alcalde Mario Amilivia. López Benito tendrá ahora, como los buenos vinos, un periodo de cuatro años de maceración para eliminar todos los gases carbónicos y los malos efluvios que, a buen seguro, no le dejan reposar. Y qué mejor sitio para guardar ese reposo bien merecido, tras tantos años de debates en las Cortes de Castilla alzando la mano para votar, que la tierra donde mejor se mece el Prieto Picudo. Pero que nadie tema por el nombre del pueblo, que no va a cambiar para pasar a llamarse Gordon-Yiyo, no, porque el acta de concejal a López Benito sólo le sirve para ocupar el puesto de diputado por el partido judicial de Sahagún, que ahora está en manos de Lucipinio Rodrigo, cuyo sustituto para temas de agricultura -de gobernar el PP, claro está,- vendrá de otra tierra de muy buen vino: El Bierzo. Curioso esto de la Diputación, muy curioso, porque le sirve a los partidos políticos para pagar sus prebendas particulares con aquellos a los que, por mor del estatus que un día mantuvieron, es necesario no dejar en la estacada, la misma en la que José Manuel Lora ha dejado al Partido Socialista que busca desesperadamente una lista con la que concurrir en Sahagún, toda vez que el todavía alcalde mantiene su negativa y nadie de sus hoy concejales quiere ser el candidato. La solución al problema, provocado por la negativa de Lora, podría pasar por la elaboración de una lista con gente de León. Lo que sí está claro es que el PSOE no quiere incurrir en los viejos errores del PP.