Alejado de sus orígenes

Es el sexto de siete hermanos, todos ellos nacidos en su casa familiar en la plaza de Don Gutierre, en el corazón del Barrio Húmedo. Se fue de León muy joven para estudiar Delineación en Madrid y al finalizar su formación comenzó a trabajar para una empresa de ingenieria americana con la que viajaba por todo el mundo. Estuvo casado en primeras nupcias en España y tuvo dos hijos. Posteriormente, conoció a la hispano-mexicana María Teresa Benito y formó una nueva familia. Vive en México desde hace 27 años. Julio López Rubín trabaja allí como gerente de ventas de la multinacional Inoxcrom. El día de su desaparición, el 16 de abril, salió de su casa para acudir a una cita de trabajo a la que nunca llegó. Su familia en León (dos hermanos y una hermana, las otras dos viven en Suecia y en Gerona), sin contacto con él desde hace al menos dos años, conoció ayer la noticia de su desaparición a través de la prensa. «Nos sorprendió enormemente», reconoció su hermano mayor, Juan López Rubín, quién explicó que cuando su hermano cambió de domicilio perdieron la relación y que hace al menos diez años que no le ven, coincidiendo con su última visita a León. Dijo también que tenían intención de ponerse en contacto con la Embajada Española en el país azteca de forma inmediata y que a través de un primo, que vive igualmente en México D.F., tratarían de conseguir más información. Expresó, además, lo extraño de la imagen de su hermano difundida en los medios. «Está desconocido físicamente, es el más guapo de todos». De él añadió que se trata de una persona «amable y muy social». Recalcó, asimismo, que su hermano y su familia viven bien allí. «Le ha podido pasar cualquier cosa, aquello es terrible, la ley de la selva».