La Embajada sigue sin noticias sobre el leonés desaparecido en México

Dieciséis días después de la desaparición de Julio López Rubín -leonés, gerente de ventas de Inoxcrom y residente en México desde hace 27 años-, la Embajada Española en el país azteca no tiene noticia alguna sobre su paradero ni pistas que ayuden al esclarecimiento del caso. Así lo aseguraron ayer desde México D.F. fuentes de la sede diplomática, en contacto permanente con las autoridades locales para conocer la evolución de este suceso. Siguen insistiendo en que no existe ningún indicio, de acuerdo a la investigación policial, que haga pensar que se encuentran ante un secuestro. También descartan por ahora la posibilidad de que el leonés desaparecido haya podido sufrir un accidente. Mientras, la Embajada mantiene el contacto directo con la familia de Julio López Rubín en México D.F.: su esposa María Teresa y su hija menor María José. La mayor (Almudena) se encuentra actualmente cursando un máster de Arqueología en España, en Tarragona. En cuanto a la familia del desaparecido en León, su hermano mayor, Juan López Rubín, comentó ayer desde su imprenta en la calle Joaquín Costa de la capital, que están en comunicación permanente con un primo que también reside en México D.F. y trabaja en una cadena hotelera propiedad de un leonés. Confían en tener noticias pronto sobre la evolución de las pesquisas policiales en la investigación de este extraño suceso. Igualmente, confirmó que la Policía Científica de León acudió a su negocio para pedirle datos y el contacto con la hija de Julio que vive en España. López Rubín desapareció en la mañana del lunes día 16 de abril cuando acudía a una cita laboral. Su familia comenzó a extrañarse al no llegar a casa después de trabajar a las seis de la tarde, como normalmente hace. Tras llamarle sucesivamente al móvil y no obtener respuesta, se pusieron en contacto con Locatel (un servicio que aglutina las emergencias) para comprobar si estaba ingresado en un hospital por un accidente. Ya al día siguiente denunciaron su caso en el Capea y en Ayuda a Víctimas de Delitos y se lo comunicaron a la Embajada.