UGT exige a Sacyl medidas concretas de seguridad en los centros sanitarios

El sindicato UGT reclama a Sacyl que implante medidas de seguridad activas que puedan atajar el número y la gravedad de las agresiones que sufre el personal sanitario en sus centros de trabajo. En un comunicado, la secretaria de Sanidad de UGT León, Carmen Ámez, apunta que «las situaciones de violencia a las que están sometidos los profesionales están llegando a presentar un gran motivo de preocupación» y «amenazan a la eficiencia del trabajo, creando desmotivación, pérdida de satisfacción profesional, estrés o daños físicos y psíquicos». La Junta, recalca el sindicato, «no ha puesto ningún remedio para prevenir y reducir la incidencia» de las agresiones y atenuar su intensidad y sus consecuencias. «Somos conscientes de que se han dotado de cámaras de vigilancia algunos locales, también que se están facilitando planes de formación a los profesionales pero echamos de menos medidas de seguridad activas contratando servicios de seguridad en aquellos centros, dependencias y horarios que se consideran de especial riesgo», precisa Ámez. Existen una serie de centros en los que, apunta Ámez, existe una constancia de riesgo más elevado «aunque no existe un mapa que debería elaborar Sacyl». Las medidas implantadas en ellos son insuficientes. «Hay cámaras en Astorga o La Bañeza y guardias de seguridad en otros centros, pero su presencia se limita a unas horas», explicó ayer la responsable de UGT. Ámez recuerda que desde el año 2005 UGT viene solicitando la valoración de las agresiones e incidentes que se producen en los centros de salud y reiterando la importancia de los hechos en distintas reuniones con responsables de Sacyl. «Las respuestas recibidas hasta ahora es que se trata de incidentes aislados o que el plan es muy costoso o, incluso, que estas medidas no evitarían la agresión». Para UGT, la presencia física de guardias de seguridad es fundamental para que los profesionales puedan realizar su trabajo en ambiente «de confianza y seguridad». El sindicato valora como muy importante que los fiscales y jueces consideren delitos las agresiones a los profesionales sanitarios pero recalca que «es importantísimo evitar que estas agresiones se produzcan».