| Reportaje | El otro mercado laboral leonés |
Los empleadores necesitan deporte
Deportistas, entrenadores y socorristas encabezan la lista de trabajos que se contratan en el extranjero al no haber demandantes «adecuados y disponibles» en el mercado nacional
Deportistas profesionales, entrenadores deportivos y bañistas-socorristas. Estos son los tres empleos que encabezan en lo que va de año el Catálogo de Ocupaciones de Difícil Cobertura en la provincia de León, es decir, aquellos puestos de trabajo que los empresarios locales contratan con extranjeros, porque «no existen en el mercado de trabajo demandantes de empleo adecuados y disponibles». El resto de las ocupaciones contratadas por los empresarios locales en el extranjero parecen encajar mejor con la idea que se tiene de los puestos de trabajo que ocupan los inmigrantes: albañiles, peones, carpinteros, empleados de hogar, peones agropecuarios, lavacoches a mano,¿ Incluso panaderos y persianistas. El Catálogo de Ocupaciones de Difícil Cobertura se realiza atendiendo a la norma sobre los derechos de los trabajadores extranjeros y su integración, y supone que los empleadores agilicen la concesión de las autorizaciones de residencia temporal y trabajo para los extranjeros, que estarán empleados por cuenta ajena. Eso sí, la norma establece que «la situación del mercado nacional de empleo permita la contratación de dichos trabajadores», es decir, que no haya trabajadores nacionales disponibles para cubrir las necesidades de los empleadores. El catálogo se elaborada cada tres meses por el Servicio Público de Empleo, y permite a los empleadores tramitar las autorizaciones siempre que las vacantes de los puestos de trabajo que necesiten cubrir lo sean en ocupaciones incluidas en este catálogo. En el caso de la provincia de León, son 21 las ocupaciones que pueden contratar los empresarios locales en el extranjero. Además de los citados trabajos de deportista profesional, entrenador deportivo y bañista-socorrista, el catálogo provincial de ocupaciones de difícil cobertura se completa con empleos que tradicionalmente se asocian con la actividad de los inmigrantes, como albañil, carpintero, carpintero de armar, persianista, carpintero metálico, montador de carpintería metálica o cristalero de edificios. También se pueden contratar instaladores de lunas de vehículos, montadores de ascensores, panaderos u operadores de máquinas para elaborar conservas de frutas, verduras y productos vegetales en general. Entre las ocupaciones en las que se consideran que la oferta de mano de obra nacional no es adecuada están la de conductor de camión para transporte internacional, empleado del hogar, limpiador de ventanas o lavacoches a mano; además de peones tanto agropecuarios como de obrtas públicas y de construcción de edificios. La mayor parte de los empleos incluidos en este catálogo se repite en prácticamente todas las provincias españolas, aunque llama la atención por ejemplo la fuerte oferta de trabajos para extranjeros relacionados con los trabajos en barcos en las zonas de costa, trabajos que van desde oficiales radioeléctricos de la marina mercante hasta cocineros, camareros y todo tipo de trabajos a bordo de los barcos. Llama la atención, sin embargo, que la oferta en buena parte de las islas se dirija a médicos, sobre todo anestesistas, de reanimación y hematólogos; además de enfermeros, en buena parte de estas provincias enfermeros obstétricos. Terapeutas de diverso tipo, topógrafos, oxicortadores a mano,... La oferta de empleos en el conjunto del país es, al menos en lo que a oficios que se pueden solicitar, amplísima. En todos ellos los servicios públicos de empleo aseguran haber encontrado dificultad para cubrir las ofertas de empleo que les demandan los empresarios.