Avisos por caídas de tejas y uralitas, principales motivos de las alarmas
La fuerte tormenta deja árboles caídos y a León sin semáforos
Policía Local y bomberos recibieron múltiples llamadas alertando de incidentes por el viento
La fuerte tormenta de viento y lluvia que asoló ayer León sobre las siete de la tarde puso ayer a prueba a las patrullas de la Policía Local y al Parque de Bomberos de León, que recibieron «muchísimas» llamadas durante toda la tarde alertando de caídas de árboles y desprendimientos de tejas y uralitas debido al intenso viento y a las fuerte aguacero que cayó sobre la capital. En la carretera de Vilecha, algunos árboles cortaron el acceso tras ser arrancados por las rachas de viento, según informaron ayer los bomberos que, además, tuvieron que realizar varias salidas a León capital y Armunia por avisos relacionados con caída de tejas y uralitas arrancadas por el viento y que no provocaron ningún daño personal ni material. Por su parte, los efectivos de la Policía Local de León tuvieron una tarde ajetreada ya que, además de atender las llamadas de emergencia por los efectos del viento, parte de la ciudad se quedó sin semáforos lo que obligó a salir a todas las patrullas para poner orden en el caos circulatorio que se originó en plena hora punta. La Agencia de Protección Civil e Interior de la Junta decretó ayer el nivel naranja del Plancal ante el riesgo de tormentas organizadas e intensas en el norte de León, en Burgos, Palencia y Soria, hasta hoy. Además, puso en marcha el Plan de Actuación ante Fenómenos Meteorológicos adversos, con refuerzos en la sala del 112 y la activación de la unidad de apoyo logístico y rescate por si fuera necesaria su intervención.