Investigan ahora al casero de la víctima del crimen de La Rioja

La Policía Judicial de la Guardia Civil de León y Logroño barajan la posibilidad de que el propietario del adosado en el que residía la víctima del crimen de La Rioja pueda aportar nuevos datos esclarecedores, y aunque de momento no se ha imputado a ninguno de los posibles sospechosos, centra ahora sus pesquisas en el casero, al tener constancia de que con anterioridad se había producido ya algún enfrentamiento, por hipotéticos impagos en el alquiler de la vivienda. Los restos mortales de la víctima del homicidio recibieron ayer cristiana sepultura en el cementerio municipal de Trobajo del Camino, en medio de la más estricta intimidad y con las escenas de dolor habituales en circunstancias de estas características. E. Antonia S. G. una mujer de 38 años, apareció muerta el pasado miércoles, con signos de violencia en el domicilio de Galilea (La Rioja) una pequeña población de poco más de 300 habitantes, ubicada a unos 40 kilómetros de Logroño, donde había residido con su última pareja sentimental hasta principios de año. Los vecinos mostraron su extrañeza ya el pasado fin de semana por el hecho de que la finada, que acudía con absoluta regularidad a los oficios religiosos, no se presentara en los del domingo pasado. La Guardia Civil acudió a la vivienda, pero no pudo franquear la puerta y encontró al perro de la joven en la calle, conducta no muy habitual. Tras superar los requisitos burocráticos de rigor y conseguir una orden judicial, accedieron al hogar en la tarde del miércoles, y hallaron el cadáver, con signos inequívocos de violencia y al menos dos cortes mortales en el cuello, al estilo de los que se practican para degollar a los animales. El primer sospechoso sobre el que actuaron las fuerzas policiales fue la última pareja que se le conoció a la finada, un vecino de Toral de los Guzmanes que fue interrogado por la Policía Judicial de León. Acudió a declarar de forma voluntaria, dijo no tener nada que ver con el asunto y manifestó que, aunque tenía previsto acudir a visitar a la fallecida un fin de semana de estos, los supuestos días de autos no estuvo en la zona en la que se cometió el crimen. Nuevos datos La investigación trata de conseguir ahora nuevos datos a través del propietario de la casa adosada, con quien la pareja había mantenido algunas disputas recientemente, a consecuencia de supuestos impagos de algunas mensualidades. De hecho, la prensa riojana especula hoy con la posibilidad de que hace algunos meses, se hubiese producido algún incidente y subraya que el segundo sospechoso tiene antecedentes penales. En cualquier caso, no se le ha imputado este delito alguno.