La UPL da por descartado un posible pacto con el PP en el Ayuntamiento

Las urnas del pasado 27 de mayo dejaron abiertas tres incógnitas en la ecuación de la UPL. X: pactar con el PSOE. Y: dejar que gobierne la lista más votada, que corresponde a los socialistas. Z: llegar a un acuerdo con el PP para formar equipo de gobierno y sumar, gracias a los tres actas de concejales leonesistas, 14 ediles. Nueve días después, la operación ha pasado de segundo a primer grado, una vez que el grupo haya decidido desechar la opción abierta con los populares y centrar su atención en los otros dos caminos. Los responsables de la UPL consideran que «sería una locura» sucumbir a las tentaciones lanzadas desde los órganos de dirección populares, tanto a nivel provincial como autonómico, que han llegado a poner el cartel de «lo que quieran», en el que se incluye la posibilidad de que el cabeza de cartel de los leonesistas, Javier Chamorro, alcance el bastón de mando y se convierta, por obra y gracia del sistema democrático de elección, en alcalde de la capital leonesa. La hipótesis, refrendada por más de un interlocutor de la lista de Amilivia en los últimos días, ha pasado por delante de los ojos de los integrantes del grupo minoritario como un espejismo en el que sería peligroso abandonarse, si se quiere trabajar con un horizonte de futuro por encima de los próximos cuatro años. Ni como regidor, ni como primer teniente de alcalde, aunque desapareciera de la escena Amilivia y fuera otro miembro del PP quien dirigiera el consistorio, parece que tendrá asiento Chamorro al lado de los populares. Donde si pueden tener acomodo los tres concejales electos de la UPL es en un equipo de gobierno municipal comandado por Francisco Fernández. Aunque se mantiene la opción de dejar que gobiernen los socialistas por su condición de lista más votada, gana enteros la suscripción de un pacto de los leonesistas con el PSOE, condicionado al cumplimiento de una serie de gestos por parte del Gobierno, que reeditaría la experiencia de hace cuatro años.