La Guardia Civil interviene en las protestas por el desvío de un vuelo de Lagun Air

Los veinticinco pasajeros del vuelo de Lagun Air Barcelona-León del viernes por la noche vivieron una auténtica odisea antes de llegar a la capital leonesa, donde recalaron a las 3.20 horas de la madrugada, cinco horas y diez minutos después de la hora prevista. Según el relato de los pasajeros, el avión debía haber despegado de la Ciudad Condal a las 21.05 para llegar a León a las 22.10. A la hora señalaba para el embarque en El Prat -20.35-, los viajeros no vieron ningún anuncio sobre su vuelo en los monitores ni escucharon instrucciones por megafonía. Hacia las 21.00 por fin informaron de que la salida se retrasaba. Dos horas y veinte minutos después del horario previsto el avión salió de Barcelona. Como el aeropuerto de León cierra a las 22.30 horas y la hora llegada prevista era la medianoche, el comandante avisó en vuelo que no podrían aterrizar en La Virgen del Camino, ni tampoco en Asturias ni Valladolid al no encontrarse operativos. Finalmente tomaron tierra hacia las 0.00 horas en el aeropuerto de Salamanca. Allí, en principio, no había nadie de la compañía para organizarles el viaje por carretera hasta León. Algunos pasajeros comenzaron a ponerse nerviosos e increparon a la tripulación, por lo que fue necesaria la presencia de la Guardia Civil. Finalmente salieron en taxi hacia la 1.00 horas y llegaron a León a las 3.20. Presentarán reclamación ante la Omic municipal.