La auditoría dejará «constancia real» de la situación del Ayuntamiento para definir su política
León auditará el consistorio para elaborar un plan de viabilidad
Fernández reclama el apoyo de la Cámara para iniciar el pago de la deuda con los proveedores
La situación financiera del consistorio de la capital leonesa pasa por ser capital para el nuevo equipo de gobierno. Saber cuánto, cómo y dónde se ha fijado como base sobre la que asentar una política de racionalización de recursos en la que no sea secundaria la relación con los proveedores, sino que se detalle un protocolo de actuación con el que mejorar la imagen de morosa de la administración y no causar trastornos en el entorno. «Vamos a hacer una auditoría para tener constancia real de la deuda y para que nos indiquen las debilidades y los puntos fuertes del Ayuntamiento», anunció el alcalde, Francisco Fernández, quien avanzó que esta primera medida servirá para «poder afrontar con garantías la elaboración de un plan de viabilidad». La intención encuentra como aliada a la Cámara de Comercio e Industria de León, que ayer realizó la visita protocolaria de bienvenida a la corporación que forman PSOE y UPL. En el encuentro, el primer edil, que comentó que el consistorio ha enviado a primeros de esta semana carta a varias empresas auditoras para pedir presupuesto, reseñó que el plan de viabilidad activará «los pagos a corto, medio y largo con los proveedores»; una tarea en la que «quien mejor puede asesorar» es la institución cameral que preside Manuel Lamelas. «Tenemos su plena colaboración y la de su junta directiva para que el trabajo en común redunde en beneficio de todos y de la ciudad de León», aseguró Francisco Fernández, en presencia de los empresarios leoneses. Sin «poner en tela de juicio ni en duda las operaciones que se ha realizado» en pasados mandatos, el alcalde destacó el primer objetivo es «tener un conocimiento claro de la deuda que el tiene el Ayuntamiento y con quién la tiene, para poder elaborar el plan de viabilidad en colaboración con la Cámara de Comercio y en contacto directo y diálogo con los proveedores», lo que «requiere un tiempo», por lo cual no quiso marcar todavía plazos que guíen el proceso.