El Inteco ideará hogares domóticos para las personas dependientes

Para que «ninguna barrera se pueda oponer a los discapacitados», el Inteco estrenó ayer el Centro Nacional de Tecnologías de la Accesibilidad. Un proyecto auspiciado por las secretarías de estado de Servicios Sociales y Telecomunicaciones y apoyada en la Fundación Once y las empresas Dragados, El Corte Inglés, Philips, Telefónica y Vodafone -abierto a más sociedades privadas-, que surge con vocación de ser «referente nacional e internacional en adaptación de tecnologías para las personas con discapacidad», según presentó Amparo Valcarce. La secretaria de Estado de Servicios Sociales explicó que el centro, que cuenta con una consignación estatal de un millón de euros y para la que no se ha oficializado cuánto personal será necesario, tendrá entre sus primeros cometidos el diseño de «tres casas domóticas, totalmente automatizadas, adaptadas a los tres niveles de dependencia que determina la Ley». «Es un proyecto de innovación que nosotros queremos generalizar para todo el sistema de dependencia», avanzó la política leonesa, quien detalló que se va a «tener en cuenta la diversidad de las discapacidades para dar una respuesta lo más personalizada posible», debido a que «la accesibilidad es indispensable para la elaboración de los proyectos que va a acoger este centro y que aportará la calidad como valor añadido». El «punto de encuentro» aglutinará «proyectos de las principales empresas del país del sector y promoverá el ensayo, la innovación, la evaluación y la muestra de los avances en accesibilidad y el diseño para todos». Pese a que «los primeros proyectos e inversiones se definirán en los próximo días», el centro cuenta con un esquema de funciones: «la muestra permanente de las tecnologías de accesibilidad; la homologación y estandarización de tecnologías de accesibilidad; la formación de un lugar común para industrias, operadores de servicios y usuarios; la creación de un laboratorio para el ensayo en condiciones reales de tecnologías del hogar; y el desarrollo de una plataforma de distintas empresas desarrolladoras para probar sus avances y evaluar las demandas»; además de que habilitará «una herramienta importante para vigilar el cumplimiento de la normativa europea de acceso a las nuevas tecnologías». El esquema funcional para cumplir con estos propósitos distribuye el trabajo en cuatro apartados: laboratorio de accesibilidad; área de sistemas, matenimiento y gestión; área de pruebas, certificación y homologación; y área de cooperación institucional, difusión y comunicación.