CEL y ULE proponen dignificar la figura del becario con más sueldo y funciones

«Dignificar la figura del becario, que tenga el sueldo y las competencias que les corresponden» es, en palabras del presidente del Círculo Empresarial Leonés (CEL), Domingo Fuertes, uno de los objetivos que pretende el convenio que ayer firmó con el rector de la Universidad de León, Ángel Penas. Además, Fuertes reconoció la importancia de estos jóvenes que, en muchos casos, realizan tareas de responsabilidad sin que sean reconocidas de forma adecuada. Además, otro de los fines del acuerdo, según explicó Fuertes, es asesorar y orientar a todos los alumnos en las ideas de negocio que se formulen, así como las salidas profesionales en el mercado laboral, «facilitando el acceso fluido a las demandas de mano de obra de las empresas por parte de los jóvenes titulados». Añadió que también se pretende crear estudios y foros de opinión que analicen las diferentes características del tejido empresarial leonés «y permitan un mayor conocimiento de la realidad actual», señaló el responsable del CEL. Ayudar a la realización y viabilidad de nuevos proyectos empresariales y promover nuevas vocaciones en este campo son otros de los objetivos que se alcanzarán con el convenio suscrito entre ambas instituciones. Por su parte, el rector de la ULE puso a disposición del CEL todos sus medios para asesorar y formar a los empresarios como «un fórmula idónea para acercar este mundo a la Universidad». Además, explicó, que gracias a este acuerdo, habrá más alumnos que podrán realizar prácticas en empresas. En la actualidad, 1.850 estudiantes universitarios leoneses (de los dos últimos años de carrera) realizan prácticas en empresas, aunque no todos se quedan. De hecho, puntualizó el rector, uno de los objetivos futuros es que todos los jóvenes que hagan prácticas inicien una relación contractual con la empresa. Fruto de este convenio, el CEL participará en el Observatorio Ocupacional que pondrá en marcha la ULE a partir del mes de enero, según anunció el rector. Una comisión mixta formada por representantes de ambas entidades será la encargada de vigilar el estricto cumplimiento del convenio así como las acciones que se llevarán a cabo. Aunque en un principio tiene una vigencia de dos años, la intención es que este acuerdo se extienda sine die.