Guisasola afirma que el salario no es el problema del déficit de médicos

Las consejerías de Sanidad y Educación, y las cuatro universidades públicas de Castilla y León, acordaron ayer crear un grupo de trabajo para frenar la escasez de recursos humanos del sistema sanitario, para lo que estudiarán medidas, que aborden la situación actual, y hagan frente a las que se plantearán a corto y largo plazo. Es decir, en unos cinco años, cuando los actuales residentes concluyan su formación, y en diez, cuando los nuevos titulados finalicen su preparación. Con esta propuesta, la Administración pretende, por un lado, atajar el problema de falta de profesionales «que afecta a todas las comunidades, como se puso de manifiesto en la última reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS)», según explicó el consejero de Sanidad, Francisco Javier Álvarez Guisasola. «No es un problema de salarios, sino de estructura», que ya se aprecia en los grados de Medicina y Enfermería, insistió para avalar el acuerdo adoptado con el responsable del área, Juan José Mateos, y los rectores de la Universidad de Burgos, José María Leal; León, Ángel Penas; Salamanca, José Ramón Alonso, y Valladolid, Evaristo Abril.