Los campesinos denuncian que el cebo está derramado en los desagües y pone en peligro a las aves
Los agricultores ecológicos reclaman un comité de científicos contra los topillos
El veneno para limitar la población de roedores no puede utilizarse en los cultivos orgánicos
El presidente de la Asociación de Agricultores Ecológicos del Sur de León -Aesurle-, Gabriel Alegre, reclama la creación de un comité científico, «formado por expertos de primer nivel y dirigido por la Universidad», para planificar futuras medidas encaminadas a evitar que la plaga de topillos vuelva a asolar los campos leoneses. «Hace doce años tuvimos el mismo problema y los ratones terminaron por desaparecer», explica Gabriel Alegre, quien no es muy partidario de luchar contra la superpoblación de roedores a través de la clorofacinona, «un veneno que pone en peligro, también, a otras especies». En este sentido, el responsable de la organización agraria denuncia que el cebo aparece derramado en los desagües, «con los granos fuera, a la vista de los pájaros», puntualiza, no sin antes recordar la existencia de aves «desprestigiadas»: «Hay aves que se consideran a extinguir y cumplen una función fundamental dentro del ecosistema, como son las grajos, que llegarán en octubre, o las cigüeñas; las dos especies se alimentan de este tipo de ratones, al igual que los zorros». Además, la utilización de la clorofacinona en los cultivos ecológicos «es imposible» y si los topillos entraran en estas fincas la Administración tendría que diseñar un plan especial para combatirlos. En paralelo La idea de crear una figura para gestionar la crisis ya fue propuesta por el secretario de Ugal, Matías Llorente, cuando exigió a la Junta que explique «dónde está una autoridad sanitaria para orientar sobre pautas de comportamiento frente a la plaga y sus consecuencias reales». Desde la organización reivindican la aportación de un experto, como lo fue Badiola con la crisis de la vacas locas, para acotar los peligros que puede correr la gente ante la expansión de los topillos por los cultivos. De hecho, Llorente cuestiona la capacidad de la Administración autonómica para hacer frente a un problema que «trasciende ya los límites de la producción agraria para convertirse en una circunstancia relevante para la salud». El sindicalista espera que se acompañen estas medidas con otras correctoras capaces de limitar la superpoblación de los roedores. «Hay que crear un comité de científicos de primer nivel, dirigido por la Universidad, para que los topillos no vuelvan a aparecer en los campos leoneses» «Es imposible utilizar la clorofacinona en los cultivos ecológicos GABRIEL ALEGRE Presidente de Aesurle