Día Mundial del Docente

CON MOTIVO DE la celebración del Día Mundial del Docente, que tuvo lugar el pasado viernes, STELE-STES quiere señalar su preocupación por la ofensiva global privatizadora que está en curso, que viene a empeorar y precarizar las condiciones laborales y profesionales del profesorado y que desvirtúa el concepto mismo de educación, que pasa de ser un derecho esencial para la formación y el progreso a un bien cotizable en el mercado. Cuando se precisa una apuesta fuerte por los sistemas públicos como ejes vertebradores de la educación, hemos echado en falta ese compromiso por parte del Gobierno español, ya que, sólo con Bélgica y Holanda por delante, nuestro Estado es el tercero de la Unión Europea con mayor porcentaje de enseñanza privada, con todo lo que ello conlleva de desregulación de condiciones laborales del profesorado, de precarización, pérdida de puestos de trabajo y dualización social. En cuanto a la inversión en educación, con un 4,7% del PIB seguimos muy a la zaga de los países de nuestro entorno. Sorprende igualmente que sindicatos autodenominados de clase hayan criticado ahora esta situación cuando en todo momento han apoyado esta ley que establece por primera vez que "el servicio público de la educación puede ser prestado por los poderes públicos y por la iniciativa social, como garantía de los derechos fundamentales de los ciudadanos": la financiación total a los centros privados en tramos no obligatorios de la enseñanza, como la educación infantil, es un ejemplo de esa filosofía privatizadora que tampoco han cuestionado estos sindicatos que jalean al Gobierno. Poco o nada ha aportado la LOE con respecto a la mejora o promoción de las condiciones de trabajo del profesorado, ya que, entre otras cuestiones, se permite el aumento de ratios, que es una medida fundamental no sólo en esa mejora de condiciones, sino para la mejora de la calidad de la enseñanza en general. Por su parte, son muchas las comunidades autónomas responsables de no respetar ese número de alumnas y alumnos por aula establecido, situación que es especialmente alarmante en los centros concertados. Pero en un día como hoy hay que mirar al resto del mundo, y desde STES-i, en muestra de solidaridad con todas nuestras compañeras y compañeros presentaremos mañana distintos escritos dirigidos a presidentes de gobierno y ministros de educación en las embajadas de Colombia, Guatemala, Etiopía y Botswana. En estos países dirigentes sindicales del sector docente han sido encarcelados recientemente o coaccionados para no ejercer su labor de defensa de unas condiciones mínimas para todo el profesorado, y por ende de una educación pública de calidad para todo el alumnado, algo que es un requisito esencial para el desarrollo de toda sociedad.