La Junta reactiva el plan de transporte metropolitano que unirá 93 localidades

l plan de transporte metropolitano de León se ejecutará con una inversión de veinte millones de euros. De la mitad de va a hacer cargo la Junta de Castilla y León, tal y como expresó ayer su director general de Transportes. José Antonio Cabrejas se reunió con representantes de los once municipios afectados por el consorcio y acotó plazos: «Después de que los ayuntamientos aprueben el borrador el plan, la Junta está en condiciones de definir el proyecto en el plazo de un mes. Y a partir de ahí nos damos tres años para implantarlo de forma progresiva», indicó en León Cabrejas, satisfecho por el avance logrado con los representantes municipales, con los que retomó el desarrollo de la iniciativa detenido por el proceso electoral de mayo. «La Junta no ha estado silente en ese tiempo, prueba de ello es la licitación hace dos meses del sistema de comunicación y de tarifas», recordó, El director general de Transportes indicó que la Junta se hará cargo del 50% de la financiación del plan de transporte metropolitano «toda la infraestructura técnica, más las bonificaciones y el porcentaje correspondiente del coste de explotación» que está llamado a facilitar la movilidad de los habitantes de 93 núcleos de población. «Hemos hecho también un esfuerzo muy importante para poner de acuerdo a 10 empresarios del sector del transporte de viajeros por carretera que integrarán el proyecto», desveló Cabrejas, que manifestó así la «complejidad» de los trámites que conlleva «integrar los intereses de once municipios con distintas demandas». El transporte metropolitano de León y su Alfoz queda ahora en manos de un órgano con «la Junta, los ayuntamientos de León, Villaquilambre y San Andrés y un miembro en representación de los ocho municipios más pequeños, porque la ponencia debe ser ágil», explicó el gestor de la consejería de Fomento, que celebró la disposición de los municipios para facilitar un acuerdo definitivo una vez que se incluyan las modificaciones presentadas por los gobiernos municipales salidos de las elecciones de mayo. «Los ayuntamientos piden subir servicios, frecuencias e integrarse en el ámbito urbano del transporte; es decir, disponer de una tarjeta única para poder usar el transporte público sin limitaciones, también en la ciudad. Esto último le corresponde decidirlo a León, que ya ha manifestado una voluntad positiva para asumir las reivindicaciones de las localidades del entorno», explicó Cabrejas, que realizó una defensa del sistema que persigue la junta para unificar el transporte en torno a la capital leonesa también por el beneficio económico: «Hay que darse cuenta de que el plan metropolitano tiene todos los condicionantes de una economía a escala; los servicios que puede dar serían un 80% más caros si se plantearan individualmente».