La Ley de Suelo no afectará a los grandes proyectos de la ciudad

La Ley de Suelo, en vigencia desde el 1 julio para luchar contra los casos de corrupción urbanística, no supondrá grandes cambios para el planteamiento urbano de la ciudad que cuenta con un PGOU «moderno» en el que ya quedaron incluidas muchas de las obligaciones postuladas en la nueva norma. De todas formas, el edil encargado del área en el Ayuntamiento, Francisco Gutiérrez, convocó ayer a los empresarios, a los colectivos sociales y a las asociaciones de vecinos para presentarles el borrador del anteproyecto redactado por la Junta, que es quien ostenta las competencias en esta materia, un documento preceptivo para adaptar la regulación al reglamento del Ejecutivo central. Con esta adecuación se modifican 64 de los 150 artículos de los que consta la ordenación autonómica, una buena parte de ellos se refieren a políticas de respeto con el medioambiente y a la reserva de parte del suelo para viviendas de protección pública. En ese sentido, el concejal recordó que los cambios no afectarán ni a la integración del ferrocarril, ni a la de Feve y tampoco al Palacio de Congresos, y, además, dijo, el Plan General de Ordenación Urbana, del 2004, ya obliga al consistorio a que se destine un 30% del suelo urbanizable y un 10% del urbano no consolidado a pisos protegidos. No obstante, y tras las reuniones que mantendrá Gutiérrez con diferentes colectivos hasta que entre en vigor, ya en el mes de julio, la norma de la Junta, el Ayuntamiento presentará algunas alegaciones «constructivas».