La ULE saca a concurso la construcción del nuevo Animalario para infectados

La Universidad de León sacó ayer a concurso el contrato de las obras de construcción del nuevo Animalario para investigación con animales infectados, tal y como publicó el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl). Se trata de un nuevo edificio que se construirá al lado del actual Animalario y del nuevo Hospital Clínico Veterinario que supondrá un avance importante en la investigación en el campo de la sanidad animal. El director del secretariado de Institutos de Investigación, Miguel Ángel Ferrero, explicó que el Animalario costará alrededor de 2,5 millones de euros y se construirá en dos fases. La primera de ellas es la que la ULE ha sacado a licitación y supondrá una inversión de 942.813 euros, procedente del Ministerio de Educación. Una cantidad con la que se realizará el edificio propiamente dicho con sus distribuciones correspondientes y que tiene un plazo de ejecución de doce meses por lo que en diciembre del 2008 podría estar terminado. La segunda fase consistirá en la dotación de los laboratorios de investigación necesarios y del resto del interior del edificio. El presupuesto previsto es de 1,5 millones de euros y se licitará en la próxima primavera. El nuevo edificio supondrá la ampliación de las instalaciones ya existentes donde, por sus dimensiones, sólo se pueden albergar pequeños animales tales como hamster, ratones o conejos, entre otros. Sin embargo, el nuevo Animalario permitirá realizar investigaciones con animales infectados de hasta 100 kilogramos de peso como corderos, terneras y ovejas. Un edificio complejo Miguel Ángel Ferrero destacó que este centro dispondrá de siete laboratorios de bioseguridad de niveles dos y tres para animales infectados con virus que pueden ser transmisibles al ser humano. Por eso, destacó que se trata de un edificio «muy complejo» ya que dispondrá de las «mayores medidas de seguridad existentes para realizar investigaciones con máximas garantías». Explicó también la importancia de este tipo de laboratorios que deben de contar con salas especiales y también con boxes. «Es como un establo muy especial pero también específico donde los sistemas de filtrado, de saneamiento y de calefacción tienen que ser muy especiales y tener la máxima seguridad». Destacó la importancia que el nuevo Animalario tendrá para la Universidad leonesa ya que «complementará una parcela en el campo de la investigación que hasta ahora no podíamos realizar en el ámbito de la sanidad animal». Con el nuevo edificio será posible analizar las patologías infecciosas de animales de mayor tamaño y permitirá así avanzar en la investigación de sus enfermedades. El Animalario actual dispone de una zona de seguridad biológica P2, destinada a alojar pequeños animales deliberadamente infectados con microorganismos patógenos. El centro cuenta con trece salas destinadas a roedores y lagomorfos, entre los que se encuentran ratas y ratones, cobayas, hámster, jerbos y conejos, a las que se unen unas instalaciones acuáticas acondicionadas para alojar truchas y peces cebra. Las instalaciones también pueden ser empleadas por otras instituciones, organismos o entidades públicas o privadas, previa autorización. Para ello, la solicitud de experimentación debe ser aprobada por la Junta de Castilla y León dentro de un riguroso proceso que valora los informes emitidos por el Comité de Ética de la Universidad de León. De hecho, Miguel Ángel Ferrero quiso destacar la importante labor que desarrolla este comité que se encarga de «visar» todos los proyectos que se realizan con animales.