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| Entrevista | Dimas Vallina |

El debate del Diario en Punto Radio aborda la situación industrial de León «Al hablar de contaminación debe prevalecer el criterio de los científicos»

La Fundación del Cemento y el Medio Ambiente asegura que las cementeras están «muy por debajo» del límite legal de emisiones y que la valorización energética no las aumenta

Publicado por
María Jesús Muñiz - n.g. | león león
León

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La situación económica y empresarial de la provincia de León respecto al resto de la comunidad será el tema que aborde hoy la tertulia "El Diario de León tiene la palabra" que se emitirá en directo a las 19.00 horas desde los estudios de Punto Radio León en la capital leonesa. Una tertulia al hilo de los informes que concluyen que esta provincia está a la cola de la comunidad con déficit de infraestructuras, falta de empresas, pérdida continua de población y de poder adquisitivo, entre otras cuestiones. A este espacio radiofónico asistirán el procurador del Partido Popular, Javier García Prieto, el secretario general del PSOE en Castilla y León, Ángel Villalba, el procurador de la UPL, Joaquín Otero, y el presidente del Círculo Empresarial Leonés, Domingo Fuertes. El estudio realizado por el sindicato UGT alerta de la excesiva concentración territorial del sector industrial en Castilla y León, demuestra que Burgos, Valladolid y Palencia concentran el sector industrial y refleja que el nivel de riqueza de la provincia leonesa es 20 puntos inferior al de Valladolid y Burgos.El segundo de los informes que llega a conclusiones similares está realizado por Analistas Financieros Internacionales (IFI) para Foro Burgos y concluye que en León sólo se asientan el 7,7% de las multinacionales que existen en la comunidad. Mientras, Valladolid evidencia un claro liderazgo, con el 66% de estas grandes empresas y Burgos el 26%. Frente a las críticas ecologistas, el criterio científico. Es lo que propugna Dimas Vallina, director gerente de la Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente, que recientemente organizó en León una jornada sobre desarrollo sostenible y valorización en la industria cementera. Vallina asegura que las emisiones de las industrias cementeras están muy por debajo de los límites legales, y que la utilización de residuos en sustitución de los combustibles fósiles no supondrá un incremento de las emisiones. También advierte de que la Administración exige controles exhaustivos y de que las garantías que existen son suficientes. Además, las principales inversiones de las empresas del sector se centran en este aspecto. Concretamente las dos cementeras de la provincia (en Castilla y León hay tres), Cementos Cosmos y Tudela Veguín, han invertido en los últimos años más de 40 millones de euros en estos procesos de mejora medioambiental. En cuanto a las perspectivas del sector cementero en un momento de agotamiento de la edificación, Vallina considera que la obra pública está salvando la situación, y que mantener los niveles de ventas actuales después de años de espectacular crecimiento es un síntoma bastante positivo. - Un año más el informe de Ecologistas en Acción coloca a las cementeras, junto con las térmicas, a la cabeza de la contaminación atmosférica. ¿Cómo se defiende el sector de este informe? -Es necesario escuchar a todos los agentes implicados, pero desde la Fundación estamos desarrollando estudios con entidades independientes como el Instituto Cerdá o la Universidad de Alcalá de Henares, además de otros centros tecnológicos de prestigio. Pretendemos con estos foros que ambas partes tengan una actitud abierta, que nos escuchemos y que de cara a la sociedad prevalezca el criterio de la comunida científica, que es la que tiene la última palabra sobre la realidad de las emisiones. -¿Y cuáles son las conclusiones científicas a este respecto? -Se ha elaborado el primer informe nacional sobre emisiones en el sector cementero, y las conclusiones son evidentes: se está muy por debajo de los límites legales y en la valorización energética, en la sustitución de combustibles fósiles por residuos; y esto no lleva asociado un incremento de las emisiones. Lo dice el Ciemat, un mecanismo asociado al Ministerio de Medio Ambiente. -Precisamente una de las grandes preocupaciones de los ecologistas era la contaminación producida por la sustitución de combustibles y la utilización de fuentes como los neumáticos. -En ese sentido hay algo contradictorio. Durante años nos hemos mirado en países más avanzados, y con estándares de protección ambiental más altos del mundo, como Holanda o Suiza y Alemania. Son esos países los que llevan valorizando residuos años. Y nosotros tenemos la legislación ambiental más estricta del mundo, y se está cumpliendo; y unos controles exhaustivos por parte de la Administración. Son suficientes garantías. Todas las voces que no estén de acuerdo son respetables, pero hay muchos más argumentos en el lado de la balanza de la utilización de estos residuos. -¿Qué tipo de residuos se utilizan en estos países para sustituir a los fósiles? -Se están utilizando todo tipo de residuos, desde neumáticos usados hasta líneas vegetales y animales, grasas, aceites usados, disolventes, plásticos,... La tipología de residuos que se puede valorizar es bastante grande. -Las cementeras españolas, ¿en qué están invirtiendo en materia medioambiental, cuál es la principal preocuación en este tema? -Las inversiones van en distintas vías, lo que tiene que ver con el encapsulado de los parques de almacenamiento de materias primas, con al inversión en filtros para reducir la contaminación, mejorar la eficiencia energética, implantación de sistemas de gestión medioambiental, planes de seguridad y salud laboral para los trabajadores,... Hay una batería de medidas que básicamente lo que están logrando es reducir emisiones de gases. -Al margen del tema medioambiental, en este momento de recesión de construcción, ¿cómo está evolucionando el sector y las ventas? -Se viene de unos años de crecimiento espectacular, y las cifras que se manejan en este año en el sector son de mantenimiento, de un crecimiento muy leve, en torno al 1%. Pero calificaría la situación de muy buena, teniendo en cuenta que venimos de unos años de gran crecimiento, y ahora estamos logrando mantenerlo. Ha disminuido el consumo de cemento en la edificación, pero el tirón de la obra civil ha logrado compensar. - ¿Cuáles son las previsiones de futuro del sector? -Razonablemente buenas, si tenemos en cuenta que es impensable mantener las tasas de crecimiento de los últimos años. Pero a corto plazo las perspectivas son buenas. -¿Cuál es la principal preocupación del sector en este momento? -Hay una preocupación bastante centrada en las zonas de eficiencia energética, hemos logrado en los últimos años mejorar hasta un 40% en este sentido, y España puede estar orgullosa de estar a la cabeza de este proceso. Estamos entre los tres países más avanzados en este sentido, cuatro puntos por encima de la media en eficiencia energética. A partir de ahí, el proceso productivo de fabricación de clinker (producto intermedio que permite la fabricación de cemento) es intensivo en consumo de energía, y por tanto generador de emisiones de CO2. En este sentido la sustitución de combustibles fósiles por combustibles alternativos es una de las cuestiones más preocupantes en este momento en el sector; en el sentido de que podemos dejar de ser vistos sólo como contribuyentes al cambio climático y empezar a ser vistos como parte de la solución. En los últimos años se han reducido en las cementeras tantas toneladas de CO2 emitidas a la atmósfera como las que generan 100.000 coches al año, y eso tiene un efecto desde luego beneficioso en la lucha contra el cambio climático. Bajo la perspectiva de la fundación es precisamente este proceso de sustitución de combustibles para mejorar tanto la eficiencia energética del sector como su situación competitiva lo que más preocupa.