La Junta decide llevar veneno contra los ratones a otras 375.000 hectáreas

La Junta de Castilla y León aplicará veneno en unas 375.000 hectáreas de barbechos, alfalfa y masas arboladas para combatir la plaga de topillos, durante los próximos tres meses. La Comisión de Desarrollo Rural de Castilla y León ha aprobado la aplicación de este veneno, mediante pastillas repartidas en el campo, dentro de un nuevo paquete de medidas de lucha contra estos roedores. Estas medidas tienen como objetivo «prevenir» que la plaga afecte a los cultivos que se siembran en esta época, en especial al cereal, según ha explicado la consejera de Agricultura de Castilla y León, Silvia Clemente. El veneno lo aplicarán 125 técnicos entre diciembre, enero y febrero, divididos en 21 equipos, en tierras en barbecho, cultivos de alfalfa y «bosquetes» o masas de árboles, que son los «reservorios» donde se concentran los topillos este otoño, ha precisado la consejera de Agricultura. La aplicación de producto químico se extenderá también a linderas y cunetas donde se haya detectado la presencia de estos animales. Otra de las medidas es una campaña de información a los agricultores, que contarán con una web y un teléfono de consultas. Charlas en 790 municipios Además, se repartirán trípticos informativos y habrá charlas en unos 790 municipios donde se han detectado esos reservorios. «La diferencia entre el año pasado y este es que» en otoño de 2006, cuando se alertó de la plaga, «no había un plan» de lucha «con esta intensidad», ha declarado Silvia Clemente. Por ello, «la situación futura tiene que ser distinta», para que no se repitan los daños en cultivos que hubo en la anterior cosecha. Clemente ha advertido, no obstante, de que estas medidas «no garantizan la erradicación» total de estos animales en los secanos, ya que «no hay ninguna garantía del resultado». Al respecto, ha destacado que las medidas puestas en marcha el pasado verano lograron reducir la plaga en un 95 por ciento en regadíos, en un 73 en viñedos y en un 49 en los cereales. La colocación del venero se hará de una forma «más localizada», en pastillas y no en grano o en tubos, y con un producto autorizado por la Unión Europea, que «se ha demostrado» que no afecta a otras especies animales, según la titular de Agricultura. Los resultados de esta y otras medidas llevadas a cabo en los últimos meses «son muy favorables, ya que fueron eficaces» en el control de la plaga, ha defendido la consejera. Estas actuaciones han incluido quemas controladas en unas 100.000 hectáreas y el arado en profundidad en otras 500.000, aproximadamente. Un trabajador por municipio Los alcaldes socialistas de la comarca abulense de La Moraña se dirigirán a la Junta de Castilla y León para solicitar que esa administración se haga cargo del coste de contratación de al menos un trabajador por ayuntamiento durante un periodo inicial de un año para mantener las medidas de exterminio y control de la plaga de topillos. Así se propuso tras mantener una reunión los alcaldes socialistas de La Moraña en esa comarca abulense para analizar la evolución de la plaga de topillos, su situación actual y la idoneidad de los medios utilizados hasta el momento para luchar contra estos animales. Además de la contratación de personal, el Partido Socialista instará a la Administración a que se pague a los agricultores el cien por cien de los daños producidos por la plaga de topillos, algo que no ocurre.