«Si no sube el precio de la remolacha no se cultivará lo que quiere la industria»

El futuro de la remolacha sigue prendido de los debates de actualidad en torno al campo leonés. Asaja manifestó ayer su postura en torno a este asunto «que tiene bastante que ver con lo que opinan la mayoría de los cultivadores», matizó José Antonio Turrado: «Nosotros creemos que al precio que ponen la remolacha va a ser imposible que la industria consiga que los agricultores cultiven toda la remolacha que quieren asentar en León». Turrado exigió, como otras organizaciones agrarias, un esfuerzo en la negociación y un compromiso de industria y las administraciones «para lograr que el precio final para el cultivador llegue a los 42 o 45 euros». Sobre el plan de abandono, reiteró: «No se puede hablar de algo en positivo cuando significa la reducción de cultivo».