El número de usuarios de San Isidro y Leitariegos durante estas fechas supone el 15% de la campaña
El último puente de la Constitució y la Inmaculada abierto -en diciembre del 2005- congregó en la estación del Alto Porma a algo más de 42.000 usuarios durante los prácticamente nueve días del periodo festivo en aquella ocasión. Las cifras duplicaron casi a las que las que San isidro había contabilizado en el puente del 2004, con 34.000 esquiadores, aunque con cinco jornadas. Esta cantidad supone alrededor del 15% del total de usuarios que registra la estación más emblemática de la provincia en una buena temporada. Leitariegos, por su parte, sumó durante los últimos puentes de diciembre que abrió (también 2005) más de 4.000 esquiadores. Ahora, las esperanzas se centran en la Navidad. La pasada temporada tampoco funcionó bien, ya que las estaciones tuvieron que cerrar el día 31 por falta de nieve y el resto de los días funcionaron bajo mínimos, perdiendo la semana de Reyes, fundamental en el cómputo global de ingresos. La mala campaña anterior, que arrancó a finales de enero con fuerza aunque con tiempo muy inestable casi hasta Semana Santa, y la pérdida ya esta temporada de tres semanas y el puente de la Constitución agudizan la crisis de un sector que ha perdido ya cientos de miles de euros ante la falta de nieve. «Todos los proyectos se construyen pensando en asegurar gran parte de la temporada, son inversiones fuertes y si la nieve falla no hay estabilidad y las pérdidas son millonarias», explica Javier, hostelero de Puebla de Lillo y afectado por la crisis.