Las zonas desfavorecidas de León vuelven a recibir 500 euros menos de media que el resto
La falta de apoyo liquida más de 400 explotaciones agrarias en la montaña
Asaja reclama a la Junta que eleve la ayuda a este territorio hasta 3.000 euros por unidad
Los criterios de reparto de ayudas a zonas desfavorecidas devuelven a las explotaciones agrarias de la montaña leonesa a la actualidad. De nuevo, por la aportación económica menor que la media de zonas desfavorecidas de otras provincias (895 euros por explotación leonesa frente a los 1.350 euros de media en el resto de la autonomía). La organización Asaja elevó hace escasas fechas el tono de sus reivindicaciones, para lograr que la Junta modificara la línea de ayudas con el fin de evitar la discriminación que sufren las explotaciones leonesas localizadas en zonas deprimidas económicamente, generalmente en la montaña, donde las condiciones orográficas y el aislamiento impiden unas condiciones mínimas de competitividad. Es posible que esta circunstancia pese en el nuevo recorte del censo de explotaciones agropecuarias (418) que se ha producido en el último año en la provincia, censo que recoge el número de beneficiarios de esos incentivos a zonas desfavorecidas: si en la campaña 2006 se concedieron ayudas a 5.491 explotaciones leonesas, ese número se redujo a 5.073 expedientes en el presente año, según reflejan los datos aportados ayer por el sindicato agrario Asaja, en un informe en el que se recoge una reducción del importe global destinado: los 5,9 millones que se asignaron en el 2006 se han quedado en 4,5 millones de euros en el 2007. Asaja define así la situación: «Al contrario de lo que hemos solicitado, la Junta iguala por debajo las ayudas a territorios desfavorecidos, y despacha con una miseria a las explotaciones que de verdad necesitan la ayuda para poder competir con otras que están asentadas en un entorno con más posibilidades». Según el criterio de este sindicato, la ayuda a cada unidad de negocio ganadero en zona de montaña debería estar en el límite de los 3.000 euros (a una distancia notable de la cantidad que ahora reciben, que incluso se ha rebajado en topes máximos de 2.500 a 1.500 euros). Asaja no oculta ahora su confianza en las promesas recibidas desde la Junta de Castilla y León y espera que se aplique un giro a los criterios de las ayudas, de tal forma que la línea de ayuda de cara a la convocatoria del 2008 se aplique de acuerdo con las necesidades económicas y sociales que expone la montaña leonesa. «De lo contrario, Asaja recurrirá con una queja formal ante las autoridades comunitarias». La Unión reconoce a las explotaciones agrarias de montaña el derecho a percibir del doble que el resto por unidad de superficie. En la práctica, la discriminación positiva no se lleva a cabo al poner un límite máximo de ayuda que se aplica de forma genérica.