Caja España prevé para el 2008 conseguir una rentabilidad de 200 millones de euros

Caja España estima que cerrará este ejercicio con unos beneficios, antes de pagar impuestos, de 180 millones de euros, o lo que es lo mismo, un 9% más que en el 2006, y se marca como objetivo para el próximo año alcanzar una rentabilidad de 200 millones de euros, a pesar de que el contexto macroeconómico apunta a una desaceleración del perfil de crecimiento de la economía española, así como a una modificación en los factores que venían impulsándola, y donde el sector industrial toma el relevo al inmobiliario como pilar de la actividad. La Asamblea General de la entidad financiera líder en la comunidad, celebrada ayer, puso el acento en la preocupación por el entorno de turbulencias que se avecina, pero, en palabras de su director, José Ignacio Lagartos, la Caja ha diseñado unas directrices básicas para seguir con su posición de liderazgo y consolidar así su presencia nacional. Por eso, la entidad apuesta por «la especialización de negocio a través de Banca de Empresas y Corporativa, Banca Personal y Privada, financiación al consumo, negocio de seguros y Banca a Distancia». A la cabeza En este escenario, tal y como trascendió al término de la asamblea, Banca de Empresas creó una importante estructura de gestores, actuación que se extenderá en el 2008 a Banca Personal. La potenciación al consumo, el impulso de negocio de seguros, tanto generales como de vida, y el mantenimiento de una posición de vanguardia en Banca a distancia, serán otras de las líneas estratégicas para poder mantener la tendencia alcista de crecimiento y la rentabilidad de la Caja, en un periodo en el que se espera una menor aportación de las hipotecas. Plan de expansión Además, el plan de expansión de la entidad no se detendrá el próximo año, y los responsables de la entidad aclararon que se abrirán 15 nuevas oficinas en España, que conllevarán la contratación de 112 nuevos empleados. Incluso se abrirán al mercado internacional con una nueva sucursal en Oporto. Pero a partir de que finalice el año, el estudio de modelos alternativos de atención continuará en las zonas rurales para garantizar un servicio óptimo, de manera similar al incremento de oficinas móviles impulsadas en este año. Finalmente, en cuanto al manido tema de fusión de cajas, y tras una pregunta pronunciada por un representante de la UGT, el presidente Santos Llamas contestó que no hay nada que destacar sobre el asunto, «del que lo único que hay es lo publicado en la prensa», dijo.