Los arquitectos exigen ampliar el catálogo de protección El edificio del INSS, otro ejemplo negativo
«Lo importante sería ampliar el catálogo de edificios a proteger en la ciudad. Quizá los arquitectos debamos entonar el mea culpa, no hemos sido todo lo exigentes que deberíamos con el cuidado de los edificios más actuales, y ahora ocurren cosas como esta». Rafael Santamaría, presidente de la Delegación de León del Colegio de Arquitectos, se lamentaba ayer de la situación de abandono que afecta al edificio central de Correos, y recordaba que «todavía hace pocas semanas han venido arquitectos de otros países a visitarlo, porque es un referente de la arquitectura del finales del siglo XX no sólo en España, sino a nivel mundial». El presidente de los arquitectos leoneses denunció ayer que la situación del edificio se debe evidentemente a una falta de mantenimiento: «Las fotografías publicadas son reveladoras, hablan mucho de quien tiene la responsabilidad de mantener el edificio». Pero también recordó Santamaría que al no tener ninguna protección específica el propietario «puede hacer y deshacer, sin tener en cuenta lo que representa desde el punto de vista arquitectónico ni la intención del autor del proyecto». Una circunstancia especialmente penosa en un edificio «que es una maravilla, hace poco una prestigiosa publicación nacional la incluía en las obras más destacadas de la arquitectura de las últimas décadas en España». El presidente de la Delegación en León está de acuerdo, sin embargo, en que la ciudad ha vivido siempre un poco de espaldas a esta construcción. «No siempre ha sido entendida en la calle, pero entre los arquitectos ha sido un auténtico referente». Rafael Santamaría aboga por hacer un esfuerzo y repasar el catálogo de edificios protegidos de la ciudad. «Es necesario ampliarlo, aún estamos a tiempo de proteger construcciones como el tanatorio, por ejemplo. Y también estar vigilantes, ir añadiendo los edificios a medida que se construyen. Quizá estamos demasiado centrados en lo antiguo, pero se están haciendo edificios muy interesantes en León, y no deben olvidarse». El presidente de la Delegación de León del Colegio de Arquitectos recordó ayer también el caso del edificio del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) en León, que será derribado para construir uno nuevo en el mismo solar, más funcional y acorde con las necesidades actuales. Rafael Santamaría recordó que el colegio ha impugnado el concurso para la nueva edificación, aunque insistió en que quizá sea tarde para salvar otro de los edificios que considera importantes para el panorama arquitectónico de la ciudad. «Está claro que la decisión sobre el futuro del edificio del INSS la tiene la propiedad, pero de nuevo hay que reconocer que los arquitectos hemos fallado en nuestra misión de vigilancia de aquellas construcciones que tienen significación en la ciudad». Santamaría recordó que la ciudad ha vivido una auténtica revolución arquitectónica en los últimos años, y considera necesario vigilar su mantenimiento.