Tan sólo León, Salamanca y Zamora pierden población en la autonomía
La población de Castilla y León alcanzó la cifra de 2.528.417 personas a 1 de enero de 2007, lo que supone un incremento de 5.397 habitantes respecto a los mismos datos del año anterior, es decir, el 0,21%, según los datos del padrón municipal que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística, lo que sitúa a la comunidad por debajo del crecimiento nacional (1,10 %). Por sexos, se divide prácticamente por partes iguales entre hombres (1.251.082) y mujeres (1.277.335). Además, fue la tercera Comunidad con menor aumento sólo superada por Galicia (0,18 por ciento) y por Asturias, donde se redujo la población el 0,19 por ciento. Esta cifra global contrasta con el saldo que arrojan los territorios del antiguo Reino de León. Por provincias, León (-1,17%), Salamanca (-0,51%) y Zamora (-0,13%) contaron con un saldo negativo en cuanto al número de habitantes respecto a los datos del ejercicio anterior. En concreto, la provincia leonesa vio reducida su población en 836 personas, hasta registrar un total de 497.387. Por su parte, Salamanca perdió 1.784 habitantes y se quedó con 351.326 y Zamora, otros 255 y descendió hasta los 197.237. En el lado contrario, Segovia ganó 2.724 habitantes. Aunque los datos son similares, en las capitales de provincia, el descenso afectó con mayor intensidad a León y Salamanca, pero no a Zamora, donde se contabilizaron tres empadronados más, hasta los 66.138. La ciudad de León perdió 1.926 personas y se situó en los 135.059 habitantes, lo que supone un retroceso del 1,41%. Por su lado, Salamanca disminuyó su población en 3.833 personas, el 2,4%, y se quedó en 155.921 personas.