Los primeros solicitantes de la renta de emancipación la tendrán en febrero
Los primeros jóvenes de entre 22 y 30 años que han solicitado la renta básica de emancipación de 210 euros mensuales cobrarán las ayudas en febrero, después de que diversas comunidades autónomas resuelvan las primeras peticiones en 30 días, según avanzó a Efe la ministra de Vivienda, Carme Chacón. «Nos dimos dos meses de plazo máximo desde la presentación de las primeras solicitudes, pero muchas comunidades autónomas nos han comunicado que en 30 días pueden empezar a facilitarnos los nombres de los primeros autorizados», afirmó Chacón. La renta de emancipación de 210 euros mensuales podrá ser percibida por jóvenes de entre 22 y 30 años con unos ingresos brutos anuales inferiores a 22.000 euros durante un máximo de cuatro años. A esta ayuda se añade el préstamo de 600 euros para la fianza y el pago del coste financiero del aval de 120 euros, y supone un complemento al resto de ayudas para facilitar el acceso a la vivienda. Más de 200.000 jóvenes Más de 200.000 jóvenes ya disponían del formulario para solicitar esta ayuda en las 48 primeras horas de puesta en marcha de la medida, a partir del 2 de enero. Chacón subrayó que no existe un límite temporal para pedir la renta básica de emancipación ni tampoco un tope económico, ya que el Ministerio de Vivienda ha previsto una cifra de 360.000 solicitantes para este año, pero «si lo piden el doble, se concederán el doble de ayudas». «España no se puede permitir tener la edad de emancipación más tardía de toda Europa y quedarnos de brazos cruzados. El objetivo de esta renta básica es que, en un tiempo breve, España pueda adelantar un año su edad de emancipación, que hoy en día se aproxima a los 30 años», manifestó la ministra de Vivienda. Chacón también anunció que su ministerio está cerrando una modificación del Plan de la Vivienda 2005-2008, que previsiblemente será aprobado en el Consejo de Ministros del próximo viernes, 11 de enero. La novedad consistirá en un paquete de medidas que permitirá ampliar las ayudas y las facilidades a los propietarios y promotores de viviendas para fomentar el mercado del alquiler, sobre todo flexibilizando las condiciones para que los propietarios con una vivienda vacía puedan optar a las ayudas de 6.000 euros.