Cinco pasos en la lucha por la educación
«Defender la escuela y la calidad de la escuela implica directamente defender una parte nuclear del patrimonio común, de cuyo uso están más necesitados los que menos tienen. Importa por ello que la escuela sea permeable, no elitista, efectivamente abierta a todos. Más aún: la escuela tiene que ser instrumento para avanzar hacia la igualdad mediante políticas tendentes a la compensación de las desigualdades de origen». Una lucha en la que se implicó desde 1919 la Asociación General de Maestros, precedente inmediato de la Fete-UGT, según recuerda Cándido Méndez en la presentación de la exposición 75 años con la enseñanza (1931-2006). Una muestra que se divide en cinco apartados, que comienzan con El difícil despegue, los precedentes y orígenes del sindicato a través del socialismo y la educación en España desde finales del siglo XIX. La segunda parte recorre la denominada «gran ilusión educativa», el periodo de la segunda república, entre 1931 y 1936, con la aparición de la Fete, y la crisis en la Institución Libre de Enseñanza, entre otros asuntos. La radicalización y el combate durante la Guerra Civil repasan las nuevas estructuras en la educación y la incorporación de la mujer, el nuevo modelo de escuela pública y la participación de los maestros en la contienda. Desde La larga noche del franquismo se repasa la labor del sindicato en los campos de concentración franceses, la agrupación en México y la labor sindicales durante esos años; para analizar finalmente la evolución educativa en la transición y la democracia, hasta nuestros días.