Los trabajadores del polígono creen que es «muy peligroso» circular por él

Algunos de los trabajadores del polígono de Trobajo del Camino advierten al Ministerio de Fomento de los «peligros» que entraña circular por este área industrial debido a la «deficiente señalización» y «mal estado» de parte de los viales. El fallecimiento de un motorista de 23 años el pasado 8 de enero al empotrarse contra un tráiler a la altura del cruce del matadero, en las inmediaciones de la zona empresarial, no ha hecho otra cosa que evidenciar la «urgente necesidad» de exigir a la Administración competente que tome las medidas oportunas para evitar «continuos accidentes» en este tramo. El presidente del Grupo Everest de Comunicación -empresa localizada en el polígono-, José Antonio López Martínez, considera que el trágico suceso de principios de mes era «una muerte anunciada» y, por eso, envió dos cartas al departamento que dirige Magdalena Álvarez, con fecha de 5 y 28 de febrero del pasado año, para alertarle de los riesgos para el tráfico en uno de los principales accesos previstos para entrar a la carretera de circunvalación. En las misivas, el responsable de la compañía editorial denunciaba la existencia de un punto en la carretera «muy peligroso» del nuevo trazado de la ronda Sur, en el tramo comprendido entre la Nacional-630 y la A-66. En esta conexión aparece una caseta que «obstaculiza» la visibilidad en el enclave más peligroso del cruce, «obligando a los vehículos, que circulan por ambas direcciones, a asumir riesgos para la integridad de las personas», según recoge una de las epístolas remitidas al Ejecutivo central, en la que se recuerdan las colisiones relativamente recientes, «algunas de ellas con consecuencias muy graves», por lo que el presidente de Everest reclamó al ministerio que elimine todos los estorbos de la infraestructura. La respuesta No obstante, el jefe de la demarcación y el director de las obras de Fomento, Carlos Casaseca Benéitez y Eugenio Canicio Sánchez, respectivamente, contestaron al primero de los escritos el 15 de febrero y justificaron la presencia de la caseta «porque se encuentra fuera de los límites de expropiación, por lo que no se tiene potestad para realizar el derribo. En el proyecto se define la señalización adecuada para este punto concreto», argumentaron. La negativa gubernamental a aplicar medidas para subsanar las deficiencias en esta vía aparejó el envió de una nueva carta, la segunda, para reiterar las amenazas de la intersección. José Antonio López Martínez sugirió entonces que la señalización indique claramente: «Cuidado peligro de muerte». En consecuencia reiteraron la denuncia al considerar de interés público que se eliminen del ramal del polígono de San Andrés -el tramo de la N-630 a la A-66- los obstáculos que impiden la visibilidad.