Hasta noviembre el Gobierno contabilizó once fallecidos, frente a los 26 del conjunto del 2006
Los accidentes mortales en el trabajo se redujeron a la mitad el año pasado
También descienden los siniestros graves, pero se incrementan las lesiones leves que conllevan baja
El número de accidentes mortales ocurridos durante el trabajo se redujo a la mitad el año pasado, en comparación con el ejercicio del 2006, según se desprende de los datos hechos públicos ayer por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. A falta de contabilizar el último mes del año, la estadística oficial señala que entre enero y noviembre del ejercicio recién concluido se produjeron en la provincia once accidentes mortales, muy lejos de la cifra del conjunto del ejercicio anterior, que se saldó para los trabajadores leoneses con 26 fallecidos. De los once muertos hasta noviembre del 2007, ocho se produjeron durante la jornada de trabajo (frente a los 18 del conjunto del 2006); mientras que tres fallecieron en accidentes in itínere, casi un tercio de los ocho fallecidos del año anterior. En conjunto la provincia registró hasta noviembre el año pasado 10.150 accidentes de trabajo con baja, siete más que en el conjunto del año anterior. La mayor parte de ellos fueron siniestros calificados como leves, 10.046; mientras que 93 se calificaron como graves (116 en el conjunto del ejercicio anterior). In itínere Una parte importante de estos accidentes se produjeron durante el trayecto de ida o de vuelta al trabajo, en concreto 740, de los que la inmensa mayoría fueron leves (731), sólo seis graves (la mitad que el año anterior) y tres mortales. A nivel nacional el número de accidentes de trabajo mortales registrados hasta noviembre se redujo un 12,8% en comparación con el mismo periodo del pasado año. En términos absolutos fueron 116 accidentes mortales menos, al pasar de 907 en los once primeros meses del 2006 a 791 en el 2007. Este descenso es casi cinco veces mayor que el registrado entre enero y noviembre del pasado año respecto al mismo periodo de 2005, que fue de 2,3%, según los datos del ministerio, que destaca que la siniestralidad laboral sigue reduciéndose. Desde enero a noviembre de 2007 se produjeron 963.054 accidentes de trabajo. De ese total 952.005 tuvieron carácter leve; 9.945, grave; y 1.104 mortal. Los datos correspondientes a la jornada laboral arrojaron un total de 872.457; con 863.490 leves; 8.176 graves; y 791 mortales. Por sectores, el más trágico fue servicios, con 296 vidas segadas; seguido de la construcción, con 266; de la industria, con 154; y de la agricultura, con 75. Respecto a los ocurridos en el trayecto, el total se quedó en 90.597; los leves, en 88.515; los graves, en 1.769; y los muertos, en 313. Aun así, en el caso de Castilla y León la provincia sigue encabezando el ránking de siniestralidad laboral, con más del 22% del total de accidentes de trabajo que se producen. En toda la comunidad hasta noviembre se registraron 45.436 siniestros de este tipo, y después de León son Valladolid (9.163) y Burgos (8.614) las provincias que más accidentes registran. En cuanto al número de fallecidos, Valladolid registró 14 del total de 66 trabajadores que murieron, seguida de León con 11, Zamora con 10 y Ávila y Burgos con 8 cada una.