San Isidro agota tres meses de campaña con el 85% de su oferta fuera de servicio

Tres meses después del inicio oficial de la temporada -esta campaña adelantada al 16 de noviembre-, San Isidro únicamente ha podido poner en servicio desde que abrió el 20 de diciembre alrededor del 15% de su superficie esquiable, que asciende a un total de 24 kilómetros. De hecho, el área disponible media hasta Carnaval no superó en ningún momento los aproximadamente dos kilómetros. Con la nieve caída durante los días de este último puente, la estación del Alto Porma ha aumentado su oferta hasta los 3,3 kilómetros, la mejor situación de la campaña, marcada por el déficit de precipitaciones blancas. A pesar de las suaves temperaturas de los últimos días, San Isidro presenta la misma oferta que el pasado fin de semana en todos sus parámetros, incluidos los espesores de nieve, gracias sobre todo a la acción de los cañones. Las pistas en servicio se centran en el sector Cebolledo y en el área de debutantes de Requejines. Sin embargo, las altas temperaturas -inusuales en esta época del año- sí han afectado al estado de la nieve en la estación asturiana de Valgrande-Pajares, que en una semana ha perdido diez centímetros en sus espesores máximos y dos kilómetros y medio de superficie esquiable. Presenta el mayor número de pistas abiertas de las estaciones de la Cordillera Cantábrica. Por lo que se refiere a Leitariegos, a lo largo de estos tres meses de temporada ha logrado poner en servicio prácticamente el 25% de sus siete kilómetros de pistas de media y también se ha visto obligada a cerrar durante varias jornadas -después de su apertura el 20 de diciembre- por falta de nieve. La estación del valle de Laciana mantiene las mismas condiciones que el fin de semana pasado, aunque sus espesores han bajado cinco y diez centímetros en el manto blanco mínimo y máximo, respectivamente.