REE acatará un cambio de trazado de la Sama-Velilla si lo decide el Gobierno

La campaña electoral de estos días juega a favor de los detractores de la línea de alta tensión Sama-Velilla y las inercias políticas de las semanas previas a unas elecciones generales conceden a los opositores de la infraestructura alguna jornada más para intentar bloquear un proyecto calificado por las plataformas leonesas de «innecesario» . Ese lapso tuvo su punto de inflexión el pasado viernes 22 de febrero cuando el Consejo de Ministros decidió no aprobar el Plan Energético Nacional tras considerar que la autopista eléctrica entre Asturias y Palencia ocasionaría daños «inasumibles» a la montaña. Esta decisión del Ejecutivo central no es más que una prórroga en el trámite y no lleva, en ningún caso, a la paralización de la iniciativa, aunque existe el compromiso del ministro de Defensa y candidato número 1 al Congreso por León, José Antonio Alonso, de buscar un trazado alternativo para evitar daños irreparables en aquellos municipios por los que pasará el tendido. Si el próximo 9 de marzo el Partido Socialista revalida los resultados del 2004, y está en situación de formar gobierno, tendrá que cumplir este compromiso y señalar un nuevo itinerario con más consenso y menos traumático. Según lo marcado Los responsables de Red Eléctrica de España, empresa encargada de construir la Sama-Velilla y cuyo presidente, Luis Atienza, ha reiterado en varias ocasiones la necesidad ineludible de levantar la línea, aseguran que acatarán cualquier resolución que venga desde el Ministerio de Industria, pero recuerdan que aún no han recibido ningún tipo de consigna y que el proceso avanza según los plazos previstos. REE está contestando ya a las más de 25.000 alegaciones presentadas contra el trazado, 20.000 en León, trámite que llevará algún tiempo por la complejidad de algunas de las quejas remitidas desde las delegaciones de Gobierno de Castilla y León y Asturias. Después, los documentos pasarán al Ministerio de Medio Ambiente para proceder a la aprobación o no de la Declaración de Impacto Ambiental. El calendario marca en el 2009 el inicio de las obras para ejecutar este proyecto que tendría que estar terminado en el 2011 para evacuar parte de la energía producida en las centrales del Principado.