«Usted es mi subordinado, por mucho que le apoyen»
El funcionario alega que se le excluía de reuniones a las que por su cargo debía acudir y que se le denegó el vehículo oficial y el acceso a Internet, además de haber anulado sus cerraduras
«Es la última vez que se atreve a pedir escritos que yo hago y firmo. Si no se lo han explicado, usted es mi subordinado y yo la gerente territorial, por mucho que le apoyen». La reclamación previa incluye documentación que, desde el punto de vista del demandante, prueba el trato de acoso a que estaba siendo sometido en su puesto de trabajo. El primero de ellos es una nota firmada en un folio, cuya autoría se adjudicada a la propia gerente. Forma parte de los 37 folios que se incluyen en la reclamación previa. De acuerdo a la versión de la presunta víctima del acoso, la Inspección General de Servicios emitió un informe el 22 de julio del 2002 en el que se propone «que por la Gerencia de Servicios Sociales se giren instrucciones precisas a la gerente para que reponga al jefe de Área de Administración en toda las funciones que le corresponden a este acuerdo». Ello responde a la situación generada con anterioridad, por la determinación de no convocar al funcionario a las reuniones «a las que por razón de su cargo debería comparecer». Se exponen en la reclamación otras particularidades: «El cambio de cerraduras para que la llave de que venía disponiendo no pueda ser usada, la denegación de vehículo oficial para desplazamientos, cuando a personal de rango jerárquico inferior le es facilitado y la denegación del acceso a Internet, contra el criterio que se sustenta con otros funcionarios». Expediente caducado Se da la circunstancia de que tras la emisión del citado informe, a instancias de la gerente (siempre según el afectado) se instruyó un expediente disciplinario que resultó finalmente sobreseído por caducidad del propio expediente. El funcionario acude en queja al Procurador del Común, que el 11 de julio del 2006 insta a la Consejería de Familia e Igualdad «ante la absoluta contradicción de las versiones emitidas por los implicados en su controversia a realizar a la mayor brevedad una supervisión de las cuestiones denunciadas, con la finalidad de comprobar la veracidad de las mismas y adoptar las medidas que procedieran». Otro de los documentos presentados por el denunciante en la reclamación previa, refiere su necesidad de redactar de forma manual los escritos y las notas «ante las instrucciones de la señora gerente para que los auxiliares no mecanicen los escritos ni las notas».