La asignatura del agua

La visita de Cristina Narbona a León concluyó en un aula, entre niños que ganan cada día en conocimientos sobre el uso responsable del agua como recurso público y bien compartido. La pedagogía es uno de los objetivos que viajan con la exposición itinerante Vive el Duero, que el Ministerio de Medio Ambiente ha asentado en León, en la explanada de Eras, desde el mes pasado. La ministra aclaró conceptos, que luego compartió con un grupo de niños que, mano alzada, guardaron turno para preguntar y responder a la titular de Medio Ambiente. Más de 1.300 niños han participado de las actividades pedagógicas de la exposición hídrica, «a los que se ha enseñado un uso responsable del agua, que tiene reflejo en sus propias familias, ya que hoy muchas veces son los niños quienes nos enseñan a hacer las cosas mejor, porque reciben una mejor formación en las escuelas», interpretó la ministra. Narbona no sólo habló para chavales, también para mayores. «Hoy la política del agua, gobierne quien gobierne, sólo puede ser acorde a nuestra pertenencia a la Unión Europea. Estamos obligados a gestionar el agua con la incorporación de criterios en exigencia ambiental y el respecto de la propia vida de los ríos. Ya no cabe pensar que son sólo canales que llevan agua y cuanta menos mejor, como todavía hoy sostienen algunos, sino que tienen que llegar al mar porque en su recorrido generan vida en sus riberas y cauces, y aportan sedimentos que permiten que en nuestras costas existen deltas y playas, y llegue agua dulce al mar para mantener su equilibrio ecológico», expuso Narbona minutos antes de cerrar su clase magistral en la capital leonesa.