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La CESM, convocante de las protestas, alega que defiende «exclusivamente» la sanidad pública

UGT acusa a los médicos de ir a la huelga para rentabilizar sus consultas privadas

El sindicato exigirá a la Junta que la declare ilegal y alega que la CESM no puede convocarla sola

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Ana Gil - león
León

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El sindicato UGT explicó ayer su visión de la huelga de médicos. La organización sindical se mostró «sorprendida» por el hecho de que «sólo León» mantenga un nivel de seguimiento y achacó este último aspecto a que «para muchos facultativos puede resultar rentable, pues, paralelamente al aumento de las listas de espera, se incrementan las espectativas económicas en sus respectivas consultas privadas». El secretario general de FSP-UGT, Antonio Domingo Bodelón, esgrimió a este respecto que «León es, con mucho, la provincia de la comunidad con más médicos especialistas trabajando, a la vez, en la sanidad pública y privada» y añadió que «el miedo que muchos tienen a perder el plus de exclusividad es un estímulo muy poderoso para secundar la huelga». Otra de las razones que UGT enumera para el seguimiento del parón médico convocado por la Confederacoón Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) de Castilla y León es «la manipulación y el engaño con el que la CESM está tratando a los facultativos». En este sentido Domingo Bodelón matizó que «la CESM, que representa a un minoritario grupo de médicos, sólo se ha preocupado de los especialistas que trabajan en la sanidad privada». El secretario general de UGT también señaló que la gerencia del Hospital de León «está actuando con total oscurantismo respecto al control de seguimiento de la huelga y la acusa de «cómplice» del parón facultativo. Además, UGT asegura que apoya todas las reivindicaciones de la CESM para convocar esta huelga. «Todas menos dos: que sólo se hable con ellos de temas de médicos, porque es ilegal e injusto, y que un plus de exclusividad se pague también a los que trabajen en la privada». Bodelón puntualizó que «la CESM no está en huelga por la dignidad de los médicos ni por la mejora de sus condiciones laborales, sino por mantener unos privilegios de los que disfrutaba con el anterior consejero de Sanidad, César Antón, que se está yendo de rositas y es el máximo responsable de esta situación. UGT anunció que exigirá al Sacyl que lleve a cabo «todas las iniciativas jurídicas necesarias para declarar esta huelga como ilegal». La respuesta de la CESM Por su parte, el presidente de la CESM, José Luis Díaz Villarig quiso responder a estas acusaciones y recordó que «esta huelga no es ilegal. UGT y Guisasola deberían estudiar la ley de huelga, que lo dice claramente. Cualquier grupo de trabajadores puede convocar una y para salir de ella es preciso un documento de salida de huelga que tiene el valor de un convecio colectivo. Nosotros no queremos negociar al margen de la mesa sectorial», puntualizó. Asimismo, criticó a UGT por ser «el único sindicato que se cree que hacemos la huelga contra ellos. Me merece todos los respetos, pero, para nuestro sindicato, UGT no existe. Lo que tiene que hacer es defender a sus afiliados y olvidarse de los médicos». En cuanto al anterior consejero de Sanidad, César Antón, Villarig precisó que «si todos los consejeros que ha habido hasta ahora y los que haya en un futuro tuvieran su sensibilidad y su tacto no se llegaría a estas situaciones» y añadió que «con él, se consiguieron los mayores logros para los médicos y sin el apoyo de los otros sindicatos. Él nos puso al nivel de las otras comunidades autónomas». El presidente de la CESM en la comunidad aprovechó para recordar que «sólo nos mueve los intereses de los médicos» y aseguró defender la sanidad pública, si bien matizó que «por ley, en este momento los médicos de la sanidad pública pueden tener consultas privadas. Cada uno cuando salga de su trabajo puede hacer lo que quiera, como cualquier trabajador».