La dieta leonesa

Andan las huestes del Partido Popular preocupadas por lo delgado, según sus dirigentes, que se ha quedado León en el nuevo organigrama de Gobierno de Zapatero. Curiosa, cuando menos, esta preocupación, porque nunca antes -en los ocho años de Gobierno de José María Aznar- mostraron la más mínima crítica por el hecho de que ningún leonés fuera, no ya ministro o portavoz del partido del Gobierno en el Congreso, ni siquiera secretario de Estado o un simple director o secretario general, cargos que ahora les parecen muy poca cosa. Y más curiosa, aún, resulta esta crítica, cuando tampoco dicen nada por el escaso peso político que León ha tenido y tiene actualmente en la Junta que, a la vista está, tiene mucho de castellana y muy poco de leonesa. Pero, si a los del PP no les basta un presidente, un portavoz, dos secretarios de Estado, varias direcciones y secretarías generales, que no desesperen porque todo apunta a que en los próximos días habrá nuevos nombramientos para leoneses en el seno del Gobierno del también leonés -que a veces lo olvidan- Zapatero. Y aquí surgen nombres como Miguel Martínez, que parece claro va a ser el próximo presidente de Paradores, algo que muchos ya dan por hecho, aunque aún no se ha hecho oficial y, en esto, como en todos los nombramientos, es necesario esperar para evitar sorpresas, que no parece vayan a sucederse. En lo que no será necesario esperar demasiado es a la hora de conocer el nombre del próximo secretario autonómico del PSOE; incluso, podría saberse ya la próxima semana. Apunten: Óscar López, segoviano, socialista de siempre, en su día secretario de las Juventudes y hombre muy querido por José Blanco.