El empresario leonés puja por el resto de acciones de la explotación

Por el momento a Victorino Alonso se le resiste la operación para hacerse con el 42% restante del paquete accionarial de González y Díez, propiedad de Mina La Camocha, en concurso de acreedores. El pasado 16 de abril el empresario leonés y los administradores concursales de La Camocha mantuvieron una reunión para solventar todos los pagos pendientes con la mina gijonesa. Alonso lanzó una oferta para hacerse con la totalidad de la empresa asturiana, pero no consiguió su cometido. El propósito de buscar una solución definitiva al deteriorado estado de la mina no fructificó, porque los gestores «exigen como condición previa retrotraer la venta, aprobada en diciembre del 2006, del paquete de acciones recientemente adquirido por el Grupo Minero Alonso». Condición impuesta Esta condición impuesta, «inaceptable para los nuevos accionistas mayoritarios, «hace inevitable la judicialización del problema», aunque, según reconocieron desde el grupo Alonso, las partes no renuncian a encontrar un acuerdo que resuelva el conflicto de ambas compañías. De todas formas, el nuevo equipo responsable ha dado luz verde a las inversiones contempladas, debido a que no hay tiempo material para conocer la resolución judicial, siendo más importante restablecer el estado de la mina, que de no actuar de forma inmediata se vería abocada al cierre.