El reciclado y la sociedad de consumo
Cada cierto tiempo, el Instituto Nacional de Estadística (INE) y otros organismos presentan informes sobre cuáles son los problemas más importantes para los españoles. Entre ellos siempre encontramos el paro, el terrorismo, la vivienda, la inmigración, etcétera, pero nunca aparecen temas como el reciclado y tratamiento de basuras o la contaminación del medio ambiente que, según mi opinión, son también muy importantes. En España el 70% de los residuos van al vertedero y sólo el 11% se recicla. Si se comparan estos datos con los de Holanda donde se recicla un 30% de los residuos o con los de Francia, donde llega a un 50%, se puede entender fácilmente que el reciclado sea nuestra mayor asignatura pendiente. Uno también se puede preguntar qué pasaba hace 40 ó 50 años con las basuras, ¿no se producían? Lo que pasaba, sobre todo en zonas rurales, era que se producía para el consumo propio por lo que prácticamente no había envases y además la mayor parte de los residuos que se producían se reutilizaban o reciclaban allí mismo. Hacia 1958 la media nacional de producción de basuras era de 0,75 kg. por persona y día mientras que en la actualidad es de 1 kg. por persona y día. En León, se ha llegado durante el 2007 a 1,16 kg. de basura por persona y día. En nuestro cubo de basura encontramos un 44% de materia orgánica, un 21% de papel y cartón, un 15% de envases, un 3% de textiles, un 7% de vidrios y un 10% de pilas y otros objetos similares. Uno de los sectores que más está creciendo es el de las nuevas tecnologías. Un ejemplo sería el teléfono móvil que se ha convertido en un dispositivo indispensable en la actualidad: más del 88% de la población española lo tiene y la cobertura móvil ocupa el 99% del territorio nacional. Su uso es mayor al del teléfono fijo y su modelo de terminal se percibe como un identificador del status social. La gran importancia que el teléfono móvil tiene en nuestra sociedad implica un aumento del número de terminales y a su vez el aumento del número de ellos que se tira. A pesar de todo hay entre 25 y 30 millones de móviles guardados, ya sea averiados o en desuso, que sus dueños se resisten a tirar o reutilizar. Ahora mismo se puede reutilizar el 90% de los componentes de los móviles: el 58% son plásticos, el 17% vidrio y el 25% metales. De los teléfonos móviles lo único que se recupera es la batería por su alto valor contaminante. Se han creado asimismo diversas instituciones que se dedican al reciclado de los diferentes elementos de un móvil como, por ejemplo, la fundación Tragamóvil. Esta fundación, puesta en marcha en 2003 pero que ya existía en 2001 con carácter piloto, ha reciclado unos 750.000 kilogramos de chatarra celular lo que equivaldría a unos 6.000.000 de móviles. Se ha producido también un incremento del número de españoles con ordenador en casa, aproximadamente más de un 20% con respecto a 2001. El aumento del número de los aparatos eléctricos y electrónicos como los electrodomésticos o los equipos informáticos y de telecomunicaciones ha producido un importante aumento del número de residuos de estos aparatos por lo que se han tenido que encontrar formas para reciclarlos. En primer lugar se determina si tienen componentes peligrosos o no, y conforme a ello, se acude a uno u otro tipo de gestor para separar sus componentes, reciclar los aprovechables y tratar los más químicos, se obtienen las materias primas secundarias que volverán a ser introducidas en el ciclo productivo. El reciclado es una de nuestras mejores bazas, junto con la reducción y la reutilización, si queremos mejorar el estado de nuestro medio ambiente o al menos no empeorarlo más.