La Junta cesa al jefe territorial de Sanidad tras la polémica por el caso del arsénico

La Junta de Castilla y León ha cesado al que fuese jefe del Servicio Territorial de Sanidad y Bienestar Social en León durante los últimos 16 años, Santiago Travieso Gil. El anuncio se produjo ayer en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl), después de meses de críticas hacia la administración autonómica con motivo de la aparición de arsénico, el pasado mes de agosto, en el agua de la localidad leonesa de Nistal de la Vega. Según el Bocyl, el cese de Travieso se produce «a petición propia», un aspecto que ha sido confirmado por el propio interesado, quien, si bien no quiso hacer declaraciones para este periódico, si aclaró su postura para otros medios de comunicación. En su exposición, Travieso aseguró que se trata de «una decisión muy meditada» que obedece a «problemas de salud» derivados de las consecuencias de una hemorragia cerebral sufrida hace años. El que fuera responsable territorial de Sanidad aseguró sentirse satisfecho por la labor realizada durante estos 16 años y anunció que regresará a su puesto de inspector médico en el ambulatorio de José Aguado. «He tenido cuatro consejeros y cuatro delegados territoriales y nunca he tenido quejas, así que estoy satisfecho. He presentado mi dimisión, al margen que haya ocurrido lo del arsénico o no», añadió. Sin emabargo, el cese de Travieso se produce meses después del anuncio de la Junta de Castilla y León de iniciar una investigación para depurar responsabilidades en el caso del arsénico. Fue el propio delegado territorial de la Junta en León, Eduardo Fernández -quien tampoco quiso ayer hacer declaraciones al respecto- quien admitió el pasado mes de enero que el servicio territorial de Sanidad detectó por primera vez arsénico en el agua de Nistal de la Vega el pasado mes de agosto. Entonces, Fernández ya advirtió que «estamos investigando por qué el servicio de Sanidad no lo comunicó al Ayuntamiento de San Justo de la Vega, ni a la Consejería de Sanidad ni a la delegación territorial de la Junta para tomar las medidas pertinentes». El delegado territorial de la Junta señaló que «reconozco el funcionamiento anormal en la comunicación entre el servicio de Sanidad y el Ayuntamiento», al tiempo que añadió: «La Junta depurará responsabilidades por ello». El cese de Travieso parece ser la consecuencia de esas investigaciones emprendidas por la Junta, que abrió un procedimiento por escrito para esclarecer lo sucedido en busca de los responsables de que el sistema de alerta tras los análisis de agua no hubiesen funcionado.