La entidad con sede en León inauguró ayer en Oporto su primera sucursal en el extranjero
Caja España coordinará su expansión internacional con otras cajas autonómicas
«La salida al exterior se hará apoyando inversiones de la autonomía en otros países»
Caja España coordinará su proceso de expansión internacional con el resto de las cajas de ahorro de la comunidad, según el modelo propuesto por la Federación de Cajas de Ahorro de Castilla y León y que actualmente se encuentra en proceso de estudio. La entidad financiera con sede en León inauguró ayer en la localidad portuguesa de Oporto su primera oficina en el exterior, a la que seguirá en el plazo aproximado de un año otra en Lisboa. Se trata de oficinas que pretenden impulsar la actividad de las 92 sucursales que la entidad financiera posee en la línea entre Galicia y Huelva. Sin embargo, las anunciadas incursiones en los países del centro de Europa o en Centroamérica tendrán que realizarse bajo criterios de máxima prudencia, teniendo en cuenta el panorama financiero internacional del momento; y en todo caso apoyadas en procesos de expansión conjuntos a través de herramientas como la sociedad de inversión de las cajas, Ahorro Corporación, o como apoyo a grandes proyectos de inversión de la comunidad en el exterior. Primera oficina internacional Así lo manifestó ayer el presidente de Caja España, Santos Llamas, durante la inauguración en Oporto de la que es la primera oficina de la entidad financiera fuera del territorio nacional. Una política de prudencia y aventura común ratificada tanto por el director general, José Ignacio Lagartos, como por el director general adjunto, Francisco Javier Ajenjo. Este último fue tajante al afirmar: «Tenemos que hacer una internacionalización rentable, donde el gasto vaya acompasado con los ingresos. Y la mejor fórmula para hacerlo es ir acompañados, aprender y después ver si emprendemos en solitario otras inversiones». Santos Llamas destacó ayer durante la inauguración que está claro que la primera salida al exterior de la caja que preside tenía que ser Portugal. «Pero en cuestiones de internacionalización no vamos a volvernos locos, y a actuaremos con tranquilidad y cautela. Nuestra intención ahora es poner en valor las oficinas de esta línea fronteriza, porque en la práctica el flujo de negocios y personas es un hecho entre los dos países, y nuestras sucursales tienen que ser transmisoras de este flujo». Por su parte, Lagartos recordó que se ha estudiado la expansión en zonas como Polonia, Rumanía o México, pero ahora no se plantean iniciar estas aventuras sin el respaldo del resto de las cajas de la comunidad o de Ahorro Corporación. También reconoció el director general que la caja ha estado volcada en la expansión nacional, en el territorio histórico y en el sector inmobiliario. «Quizá sea hora de diversificar y encontrar otras oportunidades de negocio con otras cajas de ahorro en otro tipo de inversiones internacionales». En cuanto a las entidades con las que se llevaría a cabo este proceso de internacionalización, Ajenjo matizó que pueden ser las del entorno «pero no tienen por qué ser las de Castilla y León. El proceso de expansión puede ser a través de la compra de entidades en Centroeuropa o Centroamérica, pero siempre con la máxima de que aporte algo positivo a nuestra cuenta de resultados». Santos Llamas hizo repaso ayer de las principales magnitudes de la entidad financiera con sede en León ante las autoridades que acudieron a la inauguración de la oficina de Oporto, a la que asistió el presidente de la Cámara Municipal de la ciudad, Pedro Branco. Por la noche los directivos de la entidad financiera con sede en León presentaron el potencial de la caja a los empresarios y autoridades de Oporto, en un acto que tuvo lugar en la Bolsa de la ciudad. Esta mañana los miembros del consejo de administración de Caja España, que ayer viajaron a Oporto, celebrarán un consejo de administración de carácter ordinario en esta ciudad.