La iniciativa surgió ya en el 2004 y ahora se recupera con más fuerza

La idea de una segunda depuradora en las inmediaciones de León capital para atender las necesidades de los vecinos de parte del área metropolitana no es nueva. Los municipios de Onzonilla y Santovenia de la Valdoncina ya se habían reunido hace años para elaborar un pequeño proyecto que contemplaba la necesidad de una planta depuradora para la zona, sobre todo, tras el desarrollo del polígono industrial. Sus reivindicaciones tomaron forma en marzo del 2004, cuando apostaron junto con Valverde de La Virgen por una mancomunidad cuya prioridad sería reclamar la depuradora. Hace cuatro años, pensaban en una posible ubicación junto a Marialba, y valoraban las instalaciones en 6,3 millones de euros. Las conversaciones con la Junta estaban muy avanzadas. De hecho, el responsable del servicio territorial de Medio Ambiente, José Luis Blanco, aseguraba en aquella época que el Gobierno autonómico iba a corregir el déficit en materia de depuración de los tres municipios y que habían elaborado varias propuestas que llegaron a la consejería en Valladolid. Todo estaba pendiente sólo de la financiación. Sin embargo, ciertas tensiones en la mancomunidad sobre quién debería liderarla frenaron, en parte, el proyecto. Superados esos roces ahora, Santovenia, Onzonilla y Valverde se han vuelto a unir y han invitado a un cuarto municipio, Vega de Infanzones, que va a resultar capital, puesto que la depuradora podría ubicarse en terrenos de la junta vecinal de ese ayuntamiento. El proyecto ha crecido en número de pueblos representados y también en presupuesto, ya que las cifras que se manejan actualmente rondan los 32 millones de euros.