La Diputación sugiere dedicar calles a las víctimas del terrorismo

Los tres partidos que integran la Corporación Provincial -PP, PSOE y UPL- han logrado consensuar una moción, que será aprobada mañana por el Pleno, para sugerir a los ayuntamientos que dediquen el nombre de alguna de sus calles, avenidas o plazas a víctimas del terrorismo vinculadas a su municipio, o bien, al nombre genérico «Víctimas del Terrorismo». Con este gesto, la Diputación pretende que los municipios de León «señalen su respeto al sacrificio personal de la víctima y en reconocimiento y admiración del ayuntamiento a los valores de libertad y democracia por los que fue asesinada». Igualmente, la moción incluye la petición de que ese acto de colocación de la plaza tenga la participación de la sociedad civil, «un homenaje de reconocimiento a su sufrimiento y a su importante papel en defensa de las libertades». La moción fue registrada ayer con la rúbrica de los portavoces de los tres grupos políticos de la Diputación y será debatida y aprobada en Pleno mañana con la unanimidad de todos. La proposición recuerda en su argumentario que acaba de cumplirse el cuarenta aniversario desde que ETA cometiera su primer asesinato. Aquella primera víctima fue el guardia civil José Ángel Pardines Arcay. Desde entonces, casi 900 personas han perdido su vida por acciones de esta banda terrorista. «Ante el sufrimiento de la sociedad procede un reconocimiento claro y explícito a todos estos ciudadanos que dieron su vida en defensa de la libertad y la democracia». Se trata de una iniciativa que partió de la dirección nacional del Partido Popular, que ahora lleva a todos los ayuntamientos del país, intentando consensuar la medida con el resto de fuezas políticas que componen cada una de estas corporaciones. como en el caso de la Diputación de León. La moción llama también la atención sobre el hecho de que hoy en día todavía «sigue patente una manifestación de indignidad para las víctimas de ETA, como es ver el nombre de sus verdugos en calles del País Vasco y Navarra, teniendo que recurrir a sentencias para conseguir la retirada de placas de esas calles y plazas de los municipios de Euskadi». También el texto apela a la libertad y la dignidad humana.