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Más de 60 empresas acuden a la jornada organizada por Adecco y Bocsa

Los empresarios se ponen en marcha para aplicar el convenio de la construcción

Preocupación por el desconocimiento de la tramitación de la tarjeta profesional para el sector

La jornada reunió en la sede de Bocsa a un buen número de empresarios del sector de la construcción

León

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Más de 60 empresas relacionadas con el sector de la construcción participaron ayer en la jornada organizada por Adecco y Bocsa sobre las implicaciones del nuevo Convenio General de la Construcción, cuyo marco de aplicación concluye en el 2011. El convenio obliga a expedir a los trabajdores del sector una Tarjeta Profesional sin la que ningún trabajador podrá desarrollar su actividad a partir del 1 de enero del 2012. Los participantes en el coloquio mostraron a los expertos su preocupación por el desconocimiento general en la aplicación de la nueva norma, y se interesaron por la tramitación necesaria para llevar a cabo a tiempo las cuestiones que les permitan cumplir sus obligaciones a tiempo. Según los organizadores, la jornada cumplió sobradamente las expectativas tanto por la expectación creada en el sector, «que es el primer paso para empezar a cumplir las normas»; como por la elevada participación. La Fundación Laboral de la Construcción es la encargada de desarrollar el reto que supone profesionalizar el sector, al ser el organismo que valida la formación que han de recibir todos los trabajadores. La jornada, en la que participó también el despacho de abogados Cuatrecasas, tuvo un carácter «eminentemente práctico», según los organizadores. León ha sido la primera ciudad en la que se celebra esta jornada, que se desarrollará después en otras zonas para seguir informando a las empresas. Fuentes de Bocsa señalan la importancia de que este tipo de jornadas se celebren en León. Acreditación El nuevo convenio de la construcción determina la formación que debe acreditar cada trabajador del sector dependiendo de las labores que lleve a cabo dentro de la obra. La formación exigida se divide en dos ciclos: por un lado un «aula permanente» que comprende la formación inicial sobre los riesgos del sector; y por otro, en un segundo ciclo, se transmitirán los conocimientos y normas específicas en relación con cada puesto de trabajo y oficio. El primer ciclo de formación tiene una duración de ocho horas; y el segundo dependerá de la función a desempeñar por el trabajador. Los gerentes de las empresas constructoras tendrán en este segundo ciclo una formación de 10 horas mínimo; mientras los delegados de prevención se formarán 70 horas y los albañiles unas 20 horas de mínimo.